Los equipos se saludan al inicio, respetan las decisiones arbitrales o se animal entre ellos ante los errores. Son algunos de los aspectos que se valoran en el proyecto Vadi (Valores, Aragón, Deporte, Integración), impulsado desde el Gobierno de Aragón, con el fin de puntuar las conductas deportivas en las competiciones de Juegos Escolares y que se extiende ahora a la provincia de Huesca tras lanzarse como piloto en Zaragoza el pasado curso.

Esta iniciativa pretende ya no solo valorar el resultado final o la puntuación obtenida durante el encuentro, sino también los valores ligados al respeto entre los participantes, su relación con el árbitro y también con el público. Se establecen así tres clasificaciones en las competiciones, la meramente deportiva, la basada en los rangos de juego limpio y el baremo entre ambas.

Para poder sumar todos estos aspectos se utilizan las nuevas tecnologías, concretamente una aplicación para móvil de uso gratuito y muy sencillo, a la que pueden acceder tanto los árbitros, como los monitores, los delegados de grada y el público, pues son los encargados de puntuar la actuación de ambos equipos en cada partido.

Se establecen así una serie de aspectos para valorar en cada encuentro. En el caso de los árbitros pueden conceder hasta seis puntos, los monitores dos, el delegado de grada uno y el público uno. “Se trata de una valoración colaborativa y participativa que necesita de la implicación de todos, ya que todos pueden y deben valorar y votar”, explican los promotores del proyecto. No obstante, una serie de mecanismos evitan que las valoraciones puedan no corresponder con la realidad, si distan mucho de las realizadas por el árbitro.

Los equipos que engloban al Diverbalonmano, pertenecientes al BM Huesca y que trabaja con las edades de iniciación, comenzarán en los encuentros correspondientes a la jornada del próximo día 17 de marzo su experiencia con estos ‘Juegos en Valores’, para la que esta semana se está formando a los diferentes miembros del club que deben familiarizarse con la aplicación, ya que serán los encargados de puntuar a través de ella: los entrenadores, los árbitros y también los padres de los niños.

“Se trata de una herramienta más para impulsar aspectos en los que nosotros llevamos mucho tiempo trabajando con los jugadores”, explica Néstor Oliva, coordinador de la base en el club oscense, que indica también que en su caso se dan circunstancias especiales, ya que en las competiciones de estas edades, casi un 90% de los equipos en la provincia pertenecen al BM Huesca. “Por ello, la competitividad queda a un segundo plano y le damos mucha importancia a estos aspectos”.

También en Huesca se implantará este sistema en las competiciones de MiniBasquet y Fútbol Sala hasta categoría benjamín. “Es importante que los niños se vayan familiarizando desde edades tan tempranas con estos comportamientos y estos conceptos, para que posteriormente, cuando hay más en juego y es más fácil que surjan los conflictos, los tengan más interiorizados”, valora Oliva.