El Fuerte de Rapitán de Jaca reabrirá tras 15 años para convertirse en un centro de ocio familiar

El emblemático Fuerte de Rapitán, de Jaca, reabrirá sus puertas en los próximos meses, tras haber estado cerrado al público durante 15 años. Las obras de rehabilitación que se han ejecutado en las cubiertas, financiadas por el Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento, y los trabajos que se van a realizar en el interior van a permitir que este edificio del siglo XIX y catalogado como Bien de Interés Cultural recobre su esplendor.

El secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, el oscense Roberto Bermúdez de Castro, inauguró este jueves las obras acompañado de otras autoridades locales, provinciales y regionales. Su coste ha alcanzado los 422.000 euros, a los que hay que sumar otros 88.000 de la redacción del proyecto y la dirección de obra sufragados por el Consistorio, que tiene cedido su uso.

Se ha actuado en 1.600 metros cuadrados, fundamentalmente en el edificio principal, ya que la fortaleza tiene una superficie de más de 25.000 metros. Las nuevas cubiertas vegetales mantienen el carácter original del edificio como infraestructura militar y posibilitan, debido a su situación elevada, una visión privilegiada de ciudad y su entorno.

Tras estas obras tan necesarias, la idea es que este espacio tenga un uso cultural y que se convierta en un "centro de ocio familiar". Lo principal, a corto plazo, es crear un espacio expositivo en el interior del edificio, realizar visitas guiadas en el entorno del fuerte y contar con servicios básicos, como un bar y elementos y actividades para los más pequeños. "Nuestra principal apuesta es aumentar esa oferta turística y y crear un lugar donde las familias puedan venir a pasar el día", explicó ayer el alcalde jaqués Juan Manuel Ramón.

Aún no hay fecha para poner en marcha esta nueva iniciativa, "la idea es hacerlo de una manera progresiva", dijo. El consistorio ha reservado 50.000 euros en el presupuesto de 2018 para reparar los daños interiores causados por las goteras, habilitar aseos en la entrada norte y colocar vallas y barandillas para garantizar la seguridad de las visitas.

Por su parte, Roberto Bermúdez de Castro destacó que el Fuerte de Rapitán es uno de los "emblemas" del patrimonio de Jaca y que el Estado dispone de una serie de recursos para posibilitar el mantenimiento de grandes edificios arquitectónicos como este que, resaltó, "lógicamente, las administraciones locales no pueden mantener". En Aragón, Fomento lleva a cabo en la actualidad obras por más de 7 millones de euros en la Colegiata de Calatayud, la parroquia de Santa María Magdalena de Zaragoza y el Palacio Episcopal de Tarazona, en la provincia zaragozana; la torre gótica de la iglesia de Santa M.ª la Mayor de Alcañiz, la muralla de la capital turolense y la Casa del Barón de Andilla de Valdealgorfa, en Teruel; y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción en Peralta de Alcofea y el castillo de Boltaña, en Huesca.

Avances en las autovías

Además, el secretario de Estado para las Administraciones Territoriales reiteró el compromiso del Gobierno central con las infraestructuras viarias de Huesca y con la reapertura del Canfranc. Anunció que las obras del tramo Huesca-Siétamo (A-23), se adjudicarán en el primer trimestre del 2018, al igual que el tramo de Tiermas (A-21). E informó de que los trabajos en Monrepós están ejecutados en más de un 60% "y se está haciendo un esfuerzo importante para que se pueda finalizar en los próximos meses".

Por último, hizo referencia a la variante de Jaca, cuyo trazado cuenta con oposición de parte de los vecinos, recordando que estuvo en exposición pública "mucho tiempo", por lo que "no tiene mucho sentido que ahora nos replanteemos una vuelta atrás".