Paredes de colores y sillones más cómodos en las salas de espera fueron los dos aspectos de mejora en los que casi todos los pequeños que forman el Consejo de la Ciudad de las Niñas y los Niños coincidieron tras visitar el hospital San Jorge de Huesca. Diecisiete alumnos de los diferentes centros de la ciudad pudieron ayer conocer de primera mano el funcionamiento del centro junto a su directora médica, Raquel Montorio, al alcalde de Huesca, Luis Felipe y a varios concejales del consistorio oscense.

El objetivo de esta visita, enmarcada en los actos del 50 aniversario de la apertura del hospital, era "pedirles su opinión, desde el punto de vista de la infancia, para mejorar no solo el proceso de la asistencia, sino también la infraestructura", explicó Montorio tras el paseo por algunas consultas y la zona de rayos.

Así, los pequeños cumplieron con su cometido, y valoraron tanto la decoración, abogando por poner algo más de color a un hospital "demasiado blanco", como a la hora de ser atendidos por los médicos. "Es importante que los doctores sean cariñosos, que sepan tu nombre y te den ánimos, para que no pienses tanto en la enfermedad", explicaba Carmen Escario, una de las integrantes del Consejo, tras la visita.

Desde la dirección tomaron buena nota de todo y encomendaron a los pequeños la tarea de realizar un folleto para acompañar a la hoja de admisión con consejos y mensajes.