Su contenido podía variar, pero no así el valor añadido que guardaban entre su pan los 450 bocadillos que este viernes se repartieron en el IES Pirámide. La iniciativa Operación Bocata celebró una nueva edición involucrando a los jóvenes en una iniciativa solidaria a través de una acción tan habitual como la de almorzar en el tiempo de recreo.

En este caso, y por segundo año consecutivo, lo recaudado se destinaba a la ONG Monegros con Nicaragua, que trabaja en el país sudámericano hace casi dos décadas, en concreto en la localidad de Ocotal.

El presidente de la ONG, Antonio Brosed, se mostró emocionado por este nuevo gesto solidario de la comunidad educativa del IES Pirámide. “Cuando recibes el apoyo de tanta gente que hace no mucho tiempo ni nos conocía, y sobre todo siendo jóvenes, te da todavía más fuerzas para seguir adelante con este proyecto”.

La fórmula se repetía de otras ediciones, y se ponían a la venta tickets solidarios para los alumnos y personal del centro oscense. Bien por 4 euros con derecho a bocadillo y agua, u otros por dos con el fin único de colaborar.

Nuevamente, la gran mayoría de los jóvenes que estudian en el IES Pirámide, -tanto de educación secundaria como de formación profesional y en la sección delegada que el centro posee en la localidad de Almudévar-, han optado por sumarse a la iniciativa y dejar en casa sus habituales almuerzos para recurrir a la opción solidaria.

La cifra se mantenía similar a la recaudada en la edición de 2016, cuando se rondaron también los 2.000 euros con la venta de los bocadillos. Nuevamente, el destino de este dinero será financiar los cuatro centros de educación infantil que son atendidos desde la Asociación Movimiento Rural Cristiano de Monegros, y en los que se asiste a cerca de 300 niños y niñas de familias con escasos recursos.

Repartidos por diferentes barrios de la zona sur de Ocotal, la más pobre de la ciudad, sigue siendo palpable en sus calles las consecuencias del huracán Mitch, que hace ya 19 años devastó el país.

Esta ayuda se basa tanto en aportes económicos para sufragar los sueldos de las educadoras y cocineras que trabajan en el centro, como en material escolar y alimentación, que asciende en torno a los 18.000 euros anuales.

Todo esto, y con el fin de que tuvieran presente el destino de lo recaudado con sus tickets solidarios, se ha acercado los alumnos del IES Pirámide a través de una serie de actividades con la presencia Antonio Brosed y de los delegados de clase, que luego han sido los encargados de transmitirlo al resto de sus compañeros.

Precisamente el presidente de la ONG viajaba este mismo viernes, coincidiendo con la celebración de la Operación Bocata, hasta Ocotal para conocer de primera mano el desarrollo de todos los proyectos que llevan en marcha desde su asociación y que van desde un centro de salud, a una casa de cultura, una granja o los ya citados centros escolares que han sido beneficiarios de la venta de bocadillos.

Así, apuntaba el propio Brosed, podrá también transmitirle la solidaridad del instituto a sus destinatarios  “Seguro que les hace más ilusión incluso que a mí porque sentirán que alguien que está a miles de kilómetros de sus casas también se preocupa por ellos”, señaló.

Para poder colaborar con su labor, la ONG tiene un programa de apadrinamiento de niños y niñas a través de una cuota mensual de 18 euros al mes, que se destina a las compras de cada familia de alimentos básicos y a sufragar los diferentes proyectos de Monegros con Nicaragua.

Los más pequeños representan uno de los pilares de la labor de la entidad, ya que como apunta su presidente, “solo a través de garantizar y mejorar en lo posible la educación de estos niños podrán tener una oportunidad en la vida”.