Almudévar aumentará las garantías de agua pero los regantes siguen reclamando Biscarrués

La puesta en marcha del embalse de Almudévar conllevará un incremento de la garantía del suministro del 7,8% para Riegos del Alto Aragón. Este porcentaje se sumará al 70% actual, pero aún así, continuará por debajo del 90% que plantea el Plan Hidrológico de la Demarcación del Ebro para asegurar el agua. Estos datos ponen de manifiesto que solo con esta obra no se alcanzarán los mínimos establecidos para atender la demanda de riego, por lo que "se hace indispensable" la construcción conjunta con Biscarrues.

El presidente de Riegos del Alto Aragón, César Trillo, señaló que este incremento del 7,8% de la garantía del suministro "no quiere decir que tengamos más agua sino que cada 100 años la garantía de que no te falte el suministro, que es ahora de un 70%, pasará casi al 80". "No obstante, "cualquier garantía por debajo del 90% no es buena", añadió al término de la junta general ordinaria de la Comunidad celebrada ayer en Huesca.

Según Trillo, estar con una garantía del 70, como en estos momentos, "es poco menos que tener un regadío precario". "Estando al 80% se mejorará un poco, pero esto supone que de cada 10 años pinchas dos, es decir no tienes agua suficiente para regar", añadió.

Estos datos fueron aportados ayer por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). El presidente del organismo de cuenca, Raimundo Lafuente, informó ayer a los regantes de la situación administrativa en la que está cada uno de estos dos proyectos. El de Almudévar sigue pendiente del informe de la Abogacía del Estado, preceptivo para que esta obra llegue al Consejo de Ministros y aquí se autorice su ejecución. El trámite coincidió con la convocatoria de las elecciones de diciembre de 2015. "Y después no se quiso firmar porque el Gobierno estaba en funciones", recordó Trillo, quien confía en que la aprobación definitiva se haga "de una vez por todas" en los próximos meses.

El embalse, a 14 km de Huesca, se adjudicó a la UTE formada por Sacyr y Corsan-Corvián Vías y Construcciones y Sogeosa por 109 millones de euros. Tienen 48 meses para levantar dos presas que cerrarán una amplia vaguada cerca de Almudévar.

Biscarrués, el proyecto de regulación en el río Gállego, sigue su tramitación en el Ministerio, donde son varios los departamentos que tienen que darle el visto bueno. "Esperemos que en septiembre u octubre esté todo listo para poder licitar la obra", comentó el presidente de Riegos del Alto Aragón.

Preocupación

En materia de nuevos regadíos, Trillo transmitió al consejero de Desarrollo Rural, Joaquín Olona, su preocupación por las dificultades existentes para finalizar los trabajos de modernización de 30.000 hectáreas de regadío debido a las "modestas disponibilidades" económicas establecidas en los presupuestos de los gobiernos central y autonómico. "Esta situación genera una gran intranquilidad entre los asociados a la hora de abordar obras de modernización ante el riesgo de que la garantía de caudales sea baja y no se pueda hacer frente a las inversiones realizadas", dijo.

Olona, que se reunió con el presidente de la comunidad general tras la junta de ayer, trasmitió a los regantes que las actuaciones en materia de nuevos regadíos se han planificado de forma "acotada", con un número de hectáreas cuantificado cuya ejecución sea "simultánea" a las obras del embalse de Almudévar.

La junta general aprobó asimismo el presupuesto de Riegos del Alto Aragón para 2017. Este tiene "un carácter conservador, muy influenciado por la pérdida de ingresos derivada de la modificación del régimen de producción hidroeléctrica y por el incremento de los impuestos medioambientales".

El documento presupuestario, aprobado por unanimidad, mantiene las partidas de 1,2 millones de euros para el mantenimiento de infraestructuras, y de 1 millón para pagar tasas e impuestos.