El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Huesca (PSOE-Cambiar-Aragón Sí Puede) ha decidido no incluir en el presupuesto de 2017 los 450.000 euros que se cobrarán por el incremento del 3% del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) y con los que no se contaba para este ejercicio. El tripartito ya había presentado la propuesta económica para el año que viene (46,4 millones) cuando el pasado día 3 salió el Real Decreto que autoriza a casi 2.000 municipios a aplicar la segunda fase de la actualización de los valores catastrales, que se suma al 10% que se subió en 2016.

Durante esta semana, el área de Hacienda ha estudiado las dos posibilidades que se presentaban: modificar la propuesta de presupuestos para incluir esos 450.000 euros de incremento del IBI y vincularlos a algún proyecto en el anexo de inversiones o dejarlo todo como estaba antes de que se publicase este decreto. Al final, se ha optado por esta última y así se comunicó ayer al resto de los grupos municipales.

José María Romance, concejal de Hacienda, señaló que se trata de aplicar "un criterio contable de prudencia". Esta precaución se debe a la incertidumbre que hay sobre los ingresos que puedan llegar del Estado (que la propuesta cifra en 300.000), ya que todavía no se han elaborado los Presupuestos Generales.

Tampoco se han presentado los del Gobierno de Aragón, donde se confía que haya una partida de al menos 600.000 euros para el Ayuntamiento de Huesca. "Todo esto nos hace ser prudentes y dejar las cuentas como están", manifestó.

Esta decisión no implica que este dinero que en principio no se contemplará en el presupuesto de 2017 no pueda emplearse. "Siempre hay mecanismos contables para realizar inversiones si llega dinero", apuntó Romance. Se esperará a que pase la primera mitad del ejercicio para conocer si, efectivamente, se cuenta con los ingresos de las otras dos administraciones y para ver cómo está la ejecución del cobro del IBI, que pocas veces se recauda al 100%. De hecho, a fecha de ayer era del 95%, lo que supone 433.000 euros menos de lo contemplado en el presupuesto de 2016, según denunció el PP.

El concejal dijo que el presupuesto se ha elaborado teniendo en cuenta estas variables y la posibilidad de que la actualización catastral pudiera aplicarse a lo largo del año. "Para no pillarnos los dedos con ingresos que no pudieran llegar hemos tomado la decisión más prudente", insistió.

El IBI es el impuesto más gravoso para el bolsillo de los ciudadanos oscenses. Para el año que termina se había previsto una recaudación de 15,1 millones, lo que supone un 32,5% de los ingresos del ayuntamiento.

Antes de la comisión de Hacienda convocada para que los grupos de la oposición presentaran sus enmiendas al borrador del presupuesto, el portavoz de PP, Gerardo Oliván, mostró su rechazo al incremento del IBI. "Defendemos que no se aplique esa revisión catastral, que es voluntaria", dijo. "El Gobierno central autoriza, aunque es potestad de los municipios aplicarla o no", añadió. Si esos 450.000 euros se hubieran sumado a los ingresos, el concejal habría solicitado que se retrasase la aprobación del documento definitivo.

La concejal popular Antonia Alcalá denunció que los socios del tripartito "se olvidan de exigir a otras administraciones recursos para la ciudad, pese a que han disminuido de forma notable las aportaciones de la DGA, la Diputación Provincial y la Comarca de La Hoya". Según dijo, de esta manera "contaríamos con 911.000 euros más de ingresos".El Coso en vez de Ramón y Cajal

Las enmiendas del PP pasan por aumentar las ayudas de urgencia, incrementar hasta 150.000 euros las becas de guardería y crear una partida de 60.000 euros para redactar el proyecto de unión de la calle Teruel con Juan XXIII. En cuanto a inversiones, proponen suprimir los 210.000 euros destinados al Centro de Transformación Agroalimentaria en la Plataforma Logística e incluir una partida de 750.000 euros para la reurbanización del Coso Bajo y otra de 200.000 para la escalinata de unión de la Ronda de Montearagón con el paseo de la muralla.

Por su parte, Ciudadanos ha presentado al borrador de presupuestos enmiendas por 500.000 euros "que repercuten directamente en el beneficio de los vecinos", indicó el portavoz, José Luis Cadena. Estas se centran en aumentar la inversión para la mejora de la red de agua de los barrios rurales y evitar sucesos como el de Apiés (dos semanas sin suministro) y las partidas de fomento para el empleo. Asimismo, reclama destinar 100.000 euros del proyecto del paseo Ramón y Cajal a finalizar las obras de reurbanización del Coso Bajo.