La escuela de pilotos del aeropuerto de Huesca ultima la obra para inaugurar sus aulas el día 30

Obras de remodelación de la nave en la que se abrirá una cafetería para el descanso de los alumnos junto a la cristalera del fondo.
La escuela de pilotos del aeropuerto de Huesca ultima la obra para inaugurar sus aulas el día 30
Javier Navarro

La escuela de pilotos Airways Aviation, instalada en el aeropuerto Huesca-Pirineos, ultima las obras de remodelación de las antiguas instalaciones del aeródromo de Monflorite para inaugurarlas el próximo 30 de noviembre. Los edificios que están en desuso se convertirán en la sede de operaciones de esta empresa británica y en las aulas de los alumnos, casi todos procedentes del Reino Unido y Oriente Medio.


"Por fin tenemos la solución a nuestros problemas de espacio en la terminal", explica el jefe de la base de operaciones del centro, Pedro Ortiz López, ya que sus oficinas ocupan los espacios con ventanillas destinados a las compañías aéreas. Además, "con este edificio abierto nos podemos empezar a dar a conocer en el mercado español", añade, ya que el objetivo también es ampliar la formación que se imparte en Huesca.


"Es un proyecto a largo plazo. Venimos para quedarnos. No solo se puede ver por la inversión que se está haciendo en el edificio, sino por los aviones que hemos traído, su mantenimiento…", recalca Ortiz. Esta empresa británica aterrizó en Huesca a finales de 2014 y, después de comprobar la viabilidad del proyecto, en mayo de 2015 se anunció su instalación tras firmar un convenio con el Gobierno de Aragón. Desde entonces, unos 50 alumnos han pasado por el centro para sacarse la licencia de piloto.


En estos momentos, son 16 los que están haciendo la instrucción en el aeropuerto, donde permanecen unos seis meses de los 16 o 17 que dura su formación, mientras que la parte teórica se imparte en Oxford, donde Airways Aviation tiene su sede, que inicialmente estaba en Coventry (Reino Unido). "Ahora estamos relativamente tranquilos en lo referente al número de alumnos, aunque se trabaja a destajo para que acaben antes de Navidad, porque en febrero o marzo llegará un número muy grande y no queremos que se solapen", comenta Pedro Ortiz. Muchos de sus alumnos proceden de Kuwait, ya que a mediados de febrero firmaron un convenio para formar pilotos para las aerolíneas nacionales.Los usos del edificio


Los trabajos en las viejas instalaciones de Monflorite comenzaron en abril, y aunque al principio se iban a centrar en la creación de aulas de unas naves para intervenir después en la antigua residencia Aneto, se acondicionó primero esta última. A finales de agosto, los alumnos, que hasta entonces se alojaban en el Aparthotel Huesca, estrenaron sus habitaciones. Hay un total de 20 y, cuando haya más, se plantearán usar algún espacio de otro edificio que hasta 2011 utilizó la escuela de pilotos Top Fly de alumnos chinos. "Los estudiantes están encantados en esta ciudad porque es tranquila, segura y un sitio perfecto para el entrenamiento. Esto en Madrid sería inviable", indica Ortiz.


En el edificio remodelado, hay un aula para unas 30 personas que servirá también para hacer presentaciones. En un espacio contiguo, ya está instalado el simulador, que se utiliza para el vuelo instrumental y para cuando empiezan con los bimotores. Ahora en Huesca tienen cinco monomotores y un bimotor, pero si llegan más alumnos es posible que tengan que duplicar la flota. Al fondo de la nave central hay una sala de reuniones, una de entrenamiento por ordenador (CBT) y biblioteca; así como cuatro salas para reunirse el instructor y el alumno antes y después del vuelo. También están los espacios destinados a la administración, la sala del jefe de vuelos, la zona de planificación y la oficina de operaciones. La parte frontal se abre a las pistas deportivas con una gran cristalera tras la que estará la zona de descanso de los alumnos con una cafetería y una cocina.


Les quedaría por remodelar un ala de estas instalaciones en forma de ‘T’, donde en un futuro se instalará un gran simulador para no tener que llevar a los alumnos a Holanda para una formación de vuelo con dos pilotos. Además, hay otros estudiantes que pasan por la sede de esta escuela en Montenegro, para obtener la licencia de vuelo para países de fuera el ámbito europeo. Ya han dejado aparcado el proyecto inicial de construir un nuevo edificio de operaciones porque se dieron cuenta de que se les quedaba pequeño, ya que esperaban un "crecimiento más paulatino".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión