El próximo día 12 se constituirá en Alquézar el comité de seguridad de la Federación Aragonesa de Montañismo (FAM), siguiendo la estela del que nació hace un año en la española. Y es que cada vez preocupa más el aumento del número de accidentes, lo que ha llevado a ambas entidades a reclamar la creación de un observatorio de seguimiento que estudie los datos y ayude a planificar políticas de prevención. En lo que va de año, los grupos de rescate de la Guardia Civil han evacuado a 24 personas fallecidas en la provincia, cifra que supera el total de 2015 (20) y 2014 (23).

"Hay mucha frecuentación en la montaña aragonesa y evidentemente tanto los empresarios como los usuarios estamos deseando que haya más turistas, pero que sea en las mejores condiciones de seguridad. Eso exige sembrar, un trabajo continuado para que la gente venga con una cultura de montaña profunda, formada, concienciada, equipada y sabiendo moverse", declara Luis Masgrau, recordando que el turismo de naturaleza supone el 10% del Producto Interior Bruto de Aragón y el 14% en Huesca.

También la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (Fedme) aboga por un órgano que sea la base de las políticas de prevención. "El gran problema que tenemos ahora mismo es que el Greim tiene sus datos, los Mossos d’Esquadra los suyos... Es difícil cuantificar el número de accidentes y sacar estadísticas fiables", comenta Alberto Ayora, miembro del comité de seguridad de la Fedme. Lo que sí es constatable es que cada día acuden más personas a la montaña y que aumenta la edad de los deportistas.

Una de las primeras iniciativas de Ayora fue contactar con el Consejo Superior de Deportes y promover una reunión con los tres grupos de rescate con competencias de Policía Judicial que investigan los accidentes (Greim, Mossos d’Esquadra y Ertzaina). Pero con un Gobierno en funciones, no ha habido avances. "Los tres grupos expusieron su disposición a colaborar, pero falta el impulso del Consejo Superior", señala Ayora.

Este organismo calcula que 1,5 millones de personas hacen anualmente algún tipo de actividad en el medio natural. Según la última Encuesta de Hábitos Deportivos en España, el senderismo y el montañismo son la tercera modalidad más practicada, solo por detrás del ciclismo y la natación y por delante de la carrera a pie. Un 31,9% de los encuestados realizaron esa actividad a lo largo del año. Además, hay que tener en cuenta que en España hay 100.000 montañeros federados, y más de 10.000 en Aragón.

La mayoría de los accidentados son senderistas, según confirman la estadísticas de siniestralidad de la Guardia Civil. "Hay rescates en escalada, en alta montaña, en barrancos, en sitios difíciles propios de alpinistas, pero la mayor parte de los recursos en marcha en Aragón son para atender gente que hacía senderos por media montaña", explica el presidente de la FAM.

Muchos de los afectados por estos accidentes, aparentemente simples, son reacios a pedir auxilio, bien por el pudor de movilizar a un grupo de socorristas y a un helicóptero, o porque temen su coste económico, pues otras autonomías aplican tasas. Esa precaución, según los expertos, puede llevar a que queden enriscados y a retrasar o complicar el dispositivo de auxilio.

Aragón es pionera en España en campañas de concienciación con Montañas Seguras, donde colaboran el Gobierno de Aragón, Aramón y la FAM. Masgrau aboga por ir más allá y hacer un análisis en profundidad "para saber qué está pasando en la montaña aragonesa". Propone lo que denomina el Observatorio de Ciencias de Montaña, bajo el impulso de la DGA y la comunidad científica, con la misión de marcar las pautas de una estrategia de prevención. Tiene precedentes en los Alpes, donde Francia e Italia llevan adelante una campaña similar a la de Aragón, pero donde también existe una institución de seguimiento.