Lascuarre afronta el tramo final de unos festejos muy participativos

La enorme animación y la numerosa respuesta a los actos programados están marcando las primeras jornadas de las fiestas de la localidad ribagorzana de Lascuarre, que afronta este fin de semana el tramo final de unos festejos que están siendo muy participativos.

Desde hace un par de años, estas fiestas se organizan desde una comisión creada al efecto en la activa asociación cultural local, que este año ha presentado como gran novedad el inicio del programa, que empezó una jornada antes de lo que era habitual en los últimos años. Así, el inicio festivo se pasó del viernes al jueves, ya que a esta jornada se trasladaron las actividades que solían programarse el lunes. Los actos finalizarán el domingo, y la decisión ha sido "atinada", según comentan los vecinos.

Varias causas han justificado este traslado de día. "El lunes era el día en que la programación tenía una mayor carga participativa pero muchos de nuestros antiguos vecinos debían volver a sus lugares de residencia y, además, estas actividades se celebraban el último día de fiesta, en la jornada que más cansados estábamos", explicó Susana Vigo, responsable de la Comisión de Fiestas.

El cambio ha resultado todo un éxito y el pasado jueves los festejos lascuarrinos estallaron por todo lo alto con una multitudinaria fiesta de la espuma. Hubo luego tiempo para las cucañas y juegos infantiles antes de la lectura del pregón y el chupinazo desde el balcón de casa Cucota, que oficializaban el comienzo de las fiestas. Después, se celebró un concurso de tortillas y una cena popular, en la que se dieron cita alrededor de 400 personas que degustaron un menú a base de callos, las tortillas del concurso, carnes y longanizas, además de los ricos postres del lugar.

Este encuentro, que siempre sirve para fomentar la convivencia vecinal, concluyó con un animado bingo, la imprescindible sesión de baile a cargo de una de las mejores orquestas del verano altoaragonés y con la discomóvil.

"Este año hay mucha gente y desde principios de agosto da gusto pasear por las calles del pueblo", comentó José Luis Lloret, muy satisfecho con el programa diseñado por una Comisión. Esta enfocó la jornada de ayer pensando sobre todo en el público infantil, con la instalación de un gran parque de hinchables, pero apostando de nuevo por la mejor música para las sesiones de baile.

Las fiestas viven este fin de semana su recta final. El párroco local, mosén Aurelio Ricou, oficiará hoy la misa de la patrona que estará cantada por la rondalla de Francisco Parra. Esta misma agrupación ofrecerá posteriormente una actuación en el centro social. Ya por la tarde se han programada los torneos clásicos de guiñote y fútbol sala antes de que vuelva en baile en sesiones de tarde y noche con la orquesta Barasona y de madrugada con la discomóvil.

Para mañana está previsto que el programa se inicie, tras la misa dominical, con un vermú popular en homenaje a la tercera edad que tendrá lugar en el centro social para –aprovechando que la orquesta, los ‘Lleida Brothers’, son de la zona– volver a recuperar el baile que en varios pueblos de la zona es conocido como ‘de la sesión vermú’.

Un concurso y baile de disfraces y sendas sesiones de bailoteo de tarde y noche con la citada orquesta marcarán el tramo final de estas fiestas, que concluirán definitivamente con la quema de una gran traca.