La atípica meteorología de los últimos meses penalizará la producción de fruta en la comarca del Bajo Cinca. Aunque es difícil realizar una previsión, los productores pronostican un descenso del 15% respecto a la campaña anterior y en algunos casos, prevén dificultades para dar salida a determinadas especies, entre ellas, el paraguayo, que ha sufrido problemas de cerramiento durante el proceso de formación.

El otoño y el invierno han resultado suaves y en general, los frutales han acusado la falta de frío. A ello, hay que unir las heladas primaverales así como el descenso de temperaturas y las persistentes lluvias registradas en plena floración, lo que "penalizó la polinización, que necesita de un ambiente seco y que resulta fundamental para garantizar una óptima cosecha", explica el responsable comarcal del sindicato UAGA en el Bajo Cinca, Manuel Rausa.

Por ejemplo, entre otros, la falta de frío ha mermado la producción de algunas variedades de melocotón amarillo, "algo insólito en esta zona", y, al mismo tiempo, las persistentes lluvias han evitado un correcto cerramiento del paraguayo, "lo que mermará su calidad y en consecuencia, su comercialización", añade el productor y director de Mercofraga, Sergio de Dios.

Precisamente, las precipitaciones registradas hace unos días también han sido las causantes del descenso de producción y calidad de las variedades tempranas de cereza, que han sufrido el rajado del fruto o simplemente, su reblandecimiento. A ello hay que unir además la tormenta de granizo que el pasado domingo afectó a entre 300 y 400 hectáreas de varias explotaciones de frutales situadas entre Torrente de Cinca y Mequinenza. En algunos casos, las afecciones fueron del 100% y además de mermar la cosecha actual, tendrán consecuencias en la próxima campaña, ya que la piedra, del tamaño de un garbanzo, dañó los árboles más jóvenes.

¿Menos fruta, mejor precio?

Desde la asociación Excofrut, que agrupa varias empresas comercializadoras de fruta, su presidente, Jordi Mora, confirma los pronósticos de sindicatos y productores, que, al mismo tiempo, coinciden con las previsiones estatales, en las que se estima que la producción de la fruta de hueso, es decir, de melocotón, nectarina o paraguayo, entre otras, sufrirá un descenso del 16%. También está previsto que se reduzcan los volúmenes de países cercanos como Francia o Italia. Mora recuerda que "el sector se rige por la ley de la oferta y la demanda y por lo tanto, en un principio, los precios deberían ser mejores ante el descenso de la producción". No obstante, atendiendo a la experiencia de las últimas campañas, los profesionales del sector muestran sus recelos y en algunos casos, manifiestan su temor hacia la imposición de las denominadas tarifas planas de las grandes redes de distribución europeas, que, al margen de la legislación actual, "fijan precios inamovibles", subraya Rausa.

Además de la ley de la oferta y la demanda, recuerdan que los mercados se ven afectados por otras circunstancias, entre ellas, las políticas. De hecho, los productores deben seguir enfrentándose al veto ruso, que, al mismo tiempo, ha sido ampliado a las exportaciones desde Turquía, lo que "nos cierra una vía de entrada habitual y además, coloca más fruta en el mercado, aumentando la competencia y posiblemente, reduciendo el precio", señala el presidente de Asaja Huesca, José Fernando Luna.

El mercado asiático

Ante esta situación, los productores y comercializadores apuestan por promocionar el consumo de fruta, que ha descendido de forma notable en España, y de forma paralela, por alcanzar nuevos mercados. En este último caso, el presidente de Excofrut muestra su satisfacción con la ampliación paulatina de los destinos tradicionales, los resultados de las experiencias iniciales con Emiratos Árabes y en especial, con la reciente firma del protocolo de exportación a China, que todavía debe superar los últimos trámites y que podría beneficiar a una docena de empresas aragonesas, entre ellas, dos fragatinas, Summer Fruits y Vega Fruit.

En opinión de Mora, "todavía resta ver qué recorrido tiene esta nueva ventana comercial, ya que China es el mayor productor mundial de fruta de hueso y además, nos encontramos ante el inconveniente añadido de la distancia logística". No obstante, el productor cree que hay mercado para determinados productos. En este sentido, Mora insiste en la necesidad de apostar por la calidad. "Año tras año, no solo suben nuestras producciones al aumentar la superficie cultivada, sino que otros países también comienzan a entrar en juego. Y, ante ello, es importante que el agricultor se centre en la calidad como sello de distinción. En mi opinión, no queda otra", concluye Mora.

4 kilos por persona y año

Además, los productores apuestan por incentivar el consumo, que "ha caído en los últimos años, especialmente en nuestro país", señala Rausa. En España, se consumen 4 kilos de fruta al año por persona y en Europa, 20. Para invertir esta tendencia, el sindicato UAGA apuesta por poner en marcha campañas anuales de promoción, que estén dirigidas a la ciudadanía y que destaquen el valor de un producto cercano, asequible y de gran calidad. Asimismo, el director de Mercofraga, que abrirá sus puertas en junio, insiste en la necesidad de dar un mejor tratamiento a la fruta, especialmente en los establecimientos y supermercados, en los que se sitúa fuera de las cámaras de refrigeración. También exige un mayor control entre el precio de compra al agricultor y aquel que paga el consumidor.