De colores vivos o más oscuros, hilos gruesos u otros más finos, punto de cruz o telas tejidas, lo importante en la iniciativa ‘La manta de la vida’ no es el aspecto de las prendas que se elaboran, sino el fin con el que se hacen. Desde hace un mes, grupos de aficionados a tejer de todo el país colaboran con la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio, con el fin de enviar mantas realizadas a mano al país, e intentar así colaborar y contribuir a frenar la situación que lleva a los civiles sirios a emigrar y convertirse en refugiados, poniendo en peligro su vida y la de sus familias en busca de un futuro mejor.

En Huesca, Natalia Arnal, propietaria de la mercería Vainica Triple, que también sirve como lugar de encuentro para un grupo de labores, ha sido la promotora de la iniciativa, que se desarrolla en numerosas ciudades españolas. “Nos enteramos a través de las redes sociales, y pensamos que era una buena forma de ayudar al pueblo sirio de una manera sencilla pero muy eficaz, ya que se trata de una aportación que sabes que va a llegar a quién realmente lo necesita”, explica.

Así, durante todo este tiempo han ido tejiendo sus propias mantas y recogiendo las de todos los oscenses que quisieran contribuir en la iniciativa. “Crear una entera es algo costoso, sobre todo en lo que respecta a tiempo, por eso mucha gente ha ido trayendo trozos, que nosotros nos hemos encargado de unir y formar mantas de mayor tamaño”. De esta manera, han conseguido reunir más de 60 de estas prendas, en diferentes tamaños. “Otra gente traía restos de lanas que podía tener en casa, para que los tejiéramos aquí, como forma también de colaborar”, aclara Arnal.

También en la asociación Amigos del Telar de Huesca han contribuido en la iniciativa, aportando algunas mantas tejidas. Respecto al perfil de las personas que han aportado sus labores a la iniciativa, Natalia Arnal explica que la mayor parte del trabajo se ha realizado en los grupos que se reúnen en su comercio, “aunque también se ha acercado mucha gente mayor que había visto el escaparate –donde hasta este martes se iban exponiendo las mantas aportadas- y que nos han traído sobre todo pedazos o restos de lanas”.

Hasta el próximo lunes 19 de octubre se puede colaborar con la iniciativa. “Lo importante es ayudar, por lo que si alguien quiere aportar mantas que tenga en casa, no necesariamente hechas a mano, también puede traerlas”, explica Arnal. Los puntos de recogida son la propia tienda Vainica Triple, situada en el número 51 del Coso Bajo de la capital oscense, o en el bar La Lola, en Travesía Ballesteros número 12, también en Huesca.