Enriscados en una pequeña repisa y a unos 50 metros del suelo, pasaron la madrugada de ayer tres escaladores murcianos que alertaron de su situación sobre las 3.30. La Guardia Civil, dada la dificultad de acceder al lugar por la oscuridad de la noche y tras comprobar que estaban en buen estado, decidió posponer el rescate hasta la llegada de las primeras luces del alba.

El dispositivo de rescate arrancó a las 7.15 con varios componentes del equipo de montaña de Huesca y el apoyo de la unidad aérea que localizó a los escaladores, con edades comprendidas entre 30 y 33 años, en una repisa a 50 metros del suelo donde quedaron atrapados en mitad de la noche, sin poder continuar con el ascenso ni tampoco descender hasta el suelo.

Pero el helicóptero no pudo dejar al especialista en el lugar donde se encontraban los enriscados y tuvo que hacerlo unos 12 metros más abajo. El agente escaló hasta el lugar para después, con ayuda de la grúa que lleva el aparato (se realizaron ciclos de hasta 40 metros), izar a los jóvenes.

Los dos hombres y la mujer, todos ellos vecinos de Yecla (Murcia), fueron trasladados hasta el aparcamiento de Riglos, donde tenían estacionado su vehículo.En un ‘puente nepalí’

Por otra parte, especialistas de la Guardia Civil de montaña también auxiliaron ayer a otra deportista que quedó enriscada en una vía ferrata de Foradada del Toscar, concretamente en el ‘puente nepalí’ (se pasa sobre una cuerda). Acudieron los agentes de Benasque, con el helicóptero, para socorrerla. 

La mujer, explicó la Guardia Civil, presentaba contusiones, magulladuras y agotamiento ya que, al parecer, sufrió una caída mientras realizaba la actividad. Se asustó y al no verse capacitada para terminar la vía ferrata, avisó a los equipos rescate. Fue evacuada al centro de salud de Benasque.

Además, los agentes de montaña de Huesca, con el helicóptero que tiene su base en la capital, socorrieron a otra mujer que se produjo una luxación de hombro en el Posets (Benasque).