Vestigios romanos para conocer Huesca

Los restos romanos hallados en la calle Canellas permitirán conocer mejor la Huesca antigua.

Solar de la calle Canellas de Huesca
Solar de la calle Canellas de Huesca

Los vestigios romanos hallados durante los trabajos previos de urbanización de una zona urbana ubicada en el casco histórico de Huesca permitirán profundizar en el conocimiento de la ciudad antigua sobre la que desarrolló el entramado moderno de la capital altoaragonesa.


Así se pone de manifiesto en el informe elaborado por la arqueóloga Julia Justes sobre los restos arquitectónicos que afloraron en la calle de Canellas de Huesca al inicio de los trabajos iniciados para la urbanización de un espacio urbano en forma de plaza.


El informe, dado a conocer por el Ayuntamiento oscense, señala que tras la limpieza superficial de la zona se pudo documentar que dicho solar estuvo ocupado durante los siglos X y XI por una vivienda musulmana.


Según la experta, bajo la referida vivienda y sobre el resto del solar se ha localizado un "interesante" conjunto de construcciones de cronología romana que podrían pertenecer a tres etapas históricas diferenciadas.


La arqueóloga detecta una primera fase de cronología romano-republicana (siglo I antes de Cristo), de la que, según afirma, quedan restos "muy desdibujados" de un edificio privado.


También distingue una segunda fase, datada posiblemente en el siglo I después de Cristo, a la que pertenece una gran estancia de 4,5 x 4,5 metros con varias salas adosadas de dimensiones sin determinar.


A juicio de la experta, estos restos apuntan a la existencia de un edificio de carácter público, con muros de gran calidad construidos a base de grandes sillares de arenisca.


A una tercera fase datada a mediados del siglo I de la era cristiana corresponden los restos de un gran canal de desagüe que atraviesa el solar en dirección oeste-este, y que, al igual que el edificio público referido, se construyó con grandes sillares.


La arqueóloga destaca como "hecho singular" la presencia de signos lapidarios en nueve de los sillares que conforman el canal de desagüe.


Añade que estos signos, cuyo significado está pendiente de estudio (marcas de cantero o indicaciones de situación), son "extremadamente raros" en las construcciones romanas del periodo alto imperial.


El informe provisional sobre estos hallazgos será entregado a la Dirección General de Patrimonio en las próximas semanas a fin de favorecer la toma de una decisión sobre su conservación y salvaguardia.


Para Justes, los "importantes" restos arqueológicos hallados, próximos al lugar donde se localizaron los vestigios del anfiteatro romano, "aumentarán el conocimiento que tenemos de la ciudad antigua".