El desdoblamiento de la N-II de Pina a Fraga supera la declaración ambiental

Para minimizar el impacto se proponen, entre otras medidas, la colocación de cerramientos y dispositivos de escape o la construcción de pasos de fauna.

Está prevista la construcción de doce viaductos
Está prevista la construcción de doce viaductos
J.BLASCO

El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica este viernes la declaración de impacto ambiental favorable para el desdoblamiento de la carretera N-II entre Pina de Ebro (Zaragoza) y Fraga (Huesca).


El consejero de Obras Públicas del Gobierno de Aragón, Rafael Fernández de Alarcón, ha subrayado que se trata de un paso adelante "positivo" que ha tardado en llegar, ya que "llevaba años para resolverse".


En unas declaraciones facilitadas por el Gobierno de Aragón, el consejero ha destacado que es necesario un desdoblamiento de la carretera "del siglo XXI, adecuado, moderno, suficiente" entre Pina y Fraga y que en el tramo entre Alfajarín y Pina hay que continuar con la política que ya inició el Gobierno de Aragón para que el peaje de la AP-2 sea gratuito.


El consejero ha explicado que a partir de esta resolución será el Ministerio de Fomento el que tenga que resolver la ejecución de los proyectos constructivos del desdoblamiento entre Pina y Fraga, ejecutando los Presupuestos Generales del Estado con las cantidades ya previstas y complementándolas con otras en 2015.


Ha apuntado que paralelamente tendrán que seguir las conversaciones con Abertis para liberalizar totalmente la AP-2 en el tramo entre Alfajarín y Pina.


La alternativa seleccionada para la conversión en autovía de la N-II entre Pina y Fraga tiene una longitud aproximada de 64 kilómetros y se realizará mediante la duplicación de la carretera en los tramos en los que sea posible y la adopción de variantes que eviten el paso de la autovía -limitada a una velocidad de 100 kilómetros por hora- por los núcleos urbanos por los que discurre actualmente la N-II: Bujaraloz, Peñalba y Candasnos.


Está prevista la construcción de doce viaductos de entre 60 y 560 metros de longitud y de un túnel de 950 metros y calzada única en sentido Fraga.


La declaración recoge los impactos de la alternativa elegida y las medidas preventivas, correctoras y complementarias, entre ellas sobre la fauna, ya que el trazado atraviesa las zonas de especial protección para las aves (ZEPA) Estepas de Monegrillo y Pina; El Basal, Las Menorcas y Llanos de Cardiel y por el límite norte de la Retuerta y Saladas de Sástago, y afecta de forma especial a la avifauna esteparia.


Los principales impactos sobre la fauna se deberán a la destrucción o deterioro de los hábitats, a la alteración de los periodos de reproducción y cría, al incremento del riesgo de atropello y al efecto barrera y fragmentación del medio generado por la nueva infraestructura.


Para minimizar el impacto se proponen, entre otras medidas, la colocación de cerramientos y dispositivos de escape, la construcción de pasos de fauna, la adecuación de los tendidos eléctricos a reponer y la paradas obligatorias en el plan de obras en los periodos de reproducción y cría de las especies protegidas.