Hecho obtiene un reconocimiento a la gestión forestal sostenible

El Ayuntamiento de Hecho ha obtenido el certificado Aenor de gestión forestal sostenible para casi 19.000 hectáreas.

El Ayuntamiento de Hecho, en el Pirineo de Huesca, ha obtenido el certificado Aenor de gestión forestal sostenible para casi 19.000 hectáreas de bosque de su término municipal de las que se obtienen madera, leña, setas y otros productos.


Según ha informado el Gobierno aragonés, este reconocimiento permitirá que los aprovechamientos forestales que se realicen en la zona designada por Aenor cuenten con la garantía del Programa de Reconocimiento de Sistemas de Certificación Forestal (PEFC), una etiqueta que se añadirá a los productos para informar que provienen de una superficie gestionada de manera sostenible.


El certificado ha sido recogido hoy por el alcalde de la localidad, Luis Gutiérrez, durante el transcurso de un acto al que ha asistido el director general de Gestión Forestal del Ejecutivo aragonés, Roque Vicente.


La Gestión Forestal Sostenible avalada por Aenor se basa en un sistema de gestión de bosques y montes que garantice el mantenimiento de su biodiversidad, productividad, capacidad de regeneración y vitalidad, así como el cumplimiento de funciones ecológicas, sociales y económicas relevantes.


Tras el acto, Roque Vicente ha destacado que la Comunidad aragonesa cuenta en la actualidad 50.150 hectáreas de bosque certificadas.


Encabeza este listado la Mancomunidad Forestal Ansó-Fago (24.428 hectáreas), también en el Pirineo de Huesca, y le sigue Hecho con 18.870 hectáreas, que representa el 37,62% del total certificado en estos momentos en el territorio forestal de Aragón.


Por encima de las 1.000 hectáreas certificadas se encuentran zonas de monte en los términos zaragozanos de Añón del Moncayo (4.459 hectáreas) y Purujosa (1.000 hectáreas).


Para garantizar la implantación de un sistema de gestión forestal sostenible, la herramienta más eficaz con la que cuenta la política forestal actual es la certificación, un proceso voluntario que garantiza que la gestión de una superficie forestal cumple unos criterios de sostenibilida medioambiental.


Este proceso no se limita al monte gestionado sino que continúa en la industria que explota los productos, mediante una cadena de custodia que se prolonga hasta que llegan al consumidor final con una etiqueta que garantiza que procede de un monte gestionado de forma sostenible.


En definitiva, según las fuentes citadas, se trata de un instrumento que garantiza al consumidor que la madera o cualquier otro producto forestal procede de bosques "gestionados de manera ambientalmente responsable, socialmente beneficiosa y económicamente viable".


Entre los diversos sistemas de certificación existentes, el Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente apostó en su momento por la implantación de la Certificación Forestal bajo el sistema PEFC (Programa de Reconocimiento de Sistemas de Certificación Forestal), ya que es el único que admite la modalidad regional.


Durante las auditorías realizadas por los técnicos de Aenor, se llevaron a cabo labores de control para verificar las labores realizadas en los bosques afectados y analizar si eran acordes con el sistema y requisitos necesarios para una correcta gestión forestal sostenible.