Huesca

San Lorenzo recorre las calles entre vítores y gestos críticos

Los concejales y políticos que acompañaban la procesión recibieron el premio 'Aliaga de Plata' 2013, una distinción crítica e irónica a la gestión desarrollada.

Los danzantes, en el día grande de San Lorenzo
San Lorenzo 2013_6
ANA IPAS

La imagen de San Lorenzo, patrón de Huesca, recorrió este sábado de nuevo en solemne procesión las calles de la ciudad en fiestas entre vivas y vítores al santo y gestos críticos a los responsables políticos municipales.


La alcaldesa de la ciudad, Ana Alós, los concejales y el resto de políticos que acompañaban la procesión recibieron en la cuesta de Santiago, punto donde tradicionalmente se producen los actos reivindicativos laurentinos, el Premio "Aliaga de Plata" 2013, una distinción en tono crítico e irónico a la gestión desarrollada por los políticos locales.


Una hora antes de emprender la imagen su camino en una carroza llena de verde albahaca, los danzantes de la ciudad rendían su particular homenaje al santo bailando ante las puertas del templo sus tradicionales danzas con palos y espadas.


A lo largo de varios minutos, los danzantes desarrollaron su colorido espectáculo con los tradicionales bailes del "Vals de las flores" o "El degollado", para acabar contagiando al público con el popular tema de San Lorenzo.


Finalizados los bailes, la imagen inició su camino hacia el edificio del Ayuntamiento de Huesca seguida por los danzantes y de decenas de parejas ataviadas con los trajes de jotero, así como por la alcaldesa de la ciudad y miembros de la corporación municipal.


En las fiestas de San Lorenzo, lo sagrado y lo profano se mezclan con naturalidad, y si el viernes miles de personas se desgañitaban en la cabalgata festiva sete sábado aclamaban con fervor a su santo patrón con motivo de la celebración de su festividad.


Instantes después de llegar a la catedral y de cruzar la plaza en dirección al palacio consistorial, se sumó a la comitiva el obispo de Huesca, Julián Ruiz, junto a miembros del cabildo catedralicio.


Ha sido en la costanilla de Santiago donde se ha producido el tradicional gesto reivindicativo-crítico de un grupo de peñistas oscenses que entregaron a todos los concejales el Premio "Aliaga de Plata" 2013.


El premio, un envoltorio con unos agudos espinos de aliaga, planta típica de zonas áridas de Aragón, estaba acompañada por un texto humorístico que motivaba la entrega de la distinción a los políticos.


El texto resaltaba que el premio estaba destinado "a los que saben que se lo merecen, a los que por su interés y esfuerzo ayudan a cerrar empresas, a los que evitan que se abran nuevas, a los que crean falsas expectativas, a los que critican lo poco que se hace y nunca aportan, a los güesquetas (gentilicio humorístico) que tanto hacen para que esto no cambie".


A media mañana, tras ser vitoreada por los oscenses, la imagen inició su camino de regreso a la basílica que lleva su nombre para presidir desde un sitial de honor una misa concelebrada por el obispo de la ciudad y miembros del cabildo, y permanecer en el templo hasta el último día de las fiestas, en el que volverá a salir para recibir la tradicional ofrenda de frutos y flores.


La jornada de este viernes, primera de las Fiestas de San Lorenzo, se vivió con intensidad en todos los puntos de la ciudad, pero especialmente en la zona del centro, donde miles de personas se divirtieron en terrazas, bailes, conciertos, verbenas, ferias, chiringuitos o con las charangas que recorren las calles.