La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha iniciado ya las labores de reparación de cimentaciones en muros de defensa en Benasque (Huesca) que se vieron afectados por el desbordamiento del río Ésera a su paso por la población y por otras localidades de la zona.

Así lo ha manifestado el presidente del Organismo de cuenca, Xavier de Pedro, tras realizar una visita a la zona afectada por la crecida junto a la directora del Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga), Nuria Gayán.

Según informa la CHE en un comunicado, De Pedro ha destacado la importancia de la colaboración y coordinación institucional entre ambos organismos para agilizar el inicio de unos trabajos que tienen un coste total estimado de 3,3 millones de euros.

En concreto, han comenzado las obras de reparación de muros de defensa en la localidad de Benasque sobre los que se asientan diversas edificaciones habitadas, así como la retirada de sedimentos para rebajar el lecho del río en Sahún, aguas arriba del embalse de Eriste.

Además, para reponer el cauce en su situación anterior a la avenida de la pasada semana, se prevén retirar los depósitos de gravas y los restos vegetales arrastrados por la crecida, que están provocando desvíos del curso fluvial, y recuperar las márgenes con los materiales extraídos.

En su comunicado, la CHE asume que las intensas lluvias registradas en la cabecera del río Ésera la pasada semana han producido "numerosos e importantes daños" en infraestructuras, tanto viales como hidráulicas, así como en propiedades y en el propio cauce del río.

En algunos tramos, añade la Confederación, el agua ha erosionado y arrastrados los terrenos de las márgenes, y en otros los depósitos de sedimentos y la vegetación ha reducido la sección de desagüe.

Según el Organismo de cuenca, las actuaciones más urgentes, las que afectan a la seguridad de las edificaciones y las personas, se han acometido de forma inmediata.

Así se ha hecho en Benasque por el riesgo por colapso de los muros afectados, y también en Sahún debido a las filtraciones de agua hacia las viviendas contiguas, que, al sobreelevarse el cauce más de dos metros, han quedado a una cota inferior a la del lecho del río.

En el caso de Sahún, los técnicos de la CHE consideran necesario dragar todo el tramo del río que discurre junto a la población de los materiales depositados durante la crecida, una operación que se coordinará con el vaciado ya autorizado del embalse próximo a la localidad.

Además, la Confederación Hidrográfica del Ebro prevé llevar a cabo otras obras de reparación en defensas "cuando los caudales del río lo permitan".

En Castejón de Sos y El Run se reconstruirán y repararán motas y muros de defensa, mientras que en Sesué y Vilanova se restituirán, además, la alineación de márgenes.

En todo el tramo del alto Ésera se realizarán limpiezas y retiradas de sedimentos y de restos vegetales