Riada en Aragón

Los establecimientos del valle de Benasque sufren miles de cancelaciones tras la riada

Un torneo de baloncesto que llevaba a la zona a más de 2.000 personas se ha suspendido y los alojamientos han perdido casi totas las reservas. El camping de Castejón podría cerrar sus puertas tras ser arrasado por el Ésera.

El camping de Castejón de Sos, destrozado
Los establecimientos del valle de Benasque sufren miles de cancelaciones
HERALDO.ES

A falta de cuantificar los daños materiales causados por la crecida del río Ésera que el martes pasado puso en vilo a todo el valle de Benasque y, por extensión, a todo Aragón, el primer golpe lo ha sufrido el sector turístico, principal motor económico de la zona. Tras la riada, los establecimientos hoteleros y campings han sufrido miles de cancelaciones, sobre todo para este fin de semana, cuando la mayoría de los alojamientos preveían buenos niveles de ocupación, un contratiempo que también afecta a restaurantes, tiendas y otros servicios.


La suspensión del torneo de baloncesto base Valle Escondido ya ha supuesto la pérdida de más de 2.000 clientes que iban a pasar en Benasque todo el fin de semana, aunque la idea es aplazarlo y que pueda jugarse en septiembre, según asegura la organización del campeonato en su página oficial. Además, muchos hoteles y campings esperaban numerosos grupos de personas procedentes tanto de España como de diferentes puntos del extranjero. “Se han cancelado prácticamente todas las reservas para este fin de semana, incluso hemos llamado a algún grupo de clientes para decirles que no vinieran, ya que en estas condiciones no podemos ofrecerles un servicio adecuado”, explica Jose María Ciria, del Hotel Ciria de Benasque.


En esta localidad todavía no hay agua corriente después de que el Ésera inundase la depuradora y arrancara los cuatro kilómetros de tuberías que transportaban el líquido tratado hasta las viviendas, por lo que las condiciones todavía no son las más óptimas. Eso sí, la mayoría del valle ya está comunicado por carretera, después de que a lo largo de este jueves se realizara un camino alternativo para posibilitar el acceso a Cerler. El próximo objetivo es conectar Benasque con los Llanos del Hospital, ya que el Hotel SPA Hospital de Benasque continúa aislado. “Se puede salir andando, pero en coche todavía no”, explican desde este antiguo refugio de caminantes, convertido ahora en privilegiado hotel.


Los responsables han decidido llamar a los clientes que habían reservado para avisarles de la situación, por lo que esperan regresar a la normalidad a partir de la semana que viene, cuando el acceso a la zona ya sea posible. “La previsión es que vinieran alrededor de un centenar de personas. No íbamos a llenar, pero al menos sí a alcanzar el 70 o el 80% de nuestra capacidad”, aseguran. Igual que es difícil llegar hasta allí, también lo es salir, por lo que una decena de clientes siguen en el hotel: “Si alguien hubiera querido volver a su casa lo hubiera podido hacer, aunque sin vehículo. Pero es gente que está de vacaciones y han decidido quedarse igual. Salvo por el acceso, aquí no hay ninguna afección”.


¿Adiós al camping de Castejón?


Los mayores daños los ha sufrido el camping Alto Ésera de Castejón de Sos, que ha quedado prácticamente destrozado por la inusitada furia de la corriente, que arrasó caravanas, bungalows e incluso la caseta de la recepción. “La imagen que ha quedado cuando ha bajado el nivel del agua es todavía más desoladora de lo que podíamos haber imaginado”, asegura Karina, trabajadora de la zona de acampada.


No exagera. De la recepción no queda ni rastro y las caravanas han sido arrastradas por la riada. Muchas han quedado bastante dañadas. “Llevo todo el día recibiendo llamadas de los clientes y mandando fotos de sus propiedades”, aseguran desde el camping, donde incluso se están planteando cerrar sus puertas de forma definitiva: “A corto plazo no se puede abrir, está todo arrasado, y a largo plazo... ya veremos”.


Cuando llega a peligrar incluso la continuidad del negocio, las reservas de este fin de semana incluso parecen algo menor. Pero lo cierto es que la perspectiva era buena, ya que esperaban a varias decenas de niños que iban a participar en un campus de fútbol en la localidad. No podrán hacerlo ya que, además del camping, el agua se ha llevado por delante todas las instalaciones deportivas de Castejón de Sos, incluyendo el campo de fútbol.


Menos daños en Cerler


Mientras la mayoría de los daños materiales se han concentrado en Benasque y Castejón de Sos, así como pequeños núcleos como Eriste, Anciles o Linsoles, en Cerler el único problema ha sido el estado en el que ha quedado la carretera en varios puntos, en los que el asfalto ha llegado a desaparecer durante cientos de metros. “En Cerler no hemos sufrido ningún daño, salvo el corte de la carretera. Este fin de semana se han anulado algunos eventos, pero a partir de la semana que viene se recuperará la normalidad. El curso y los márgenes del río tardarán en volver a estar en buen estado, pero el servicio a los turistas será el mismo, y podrán disfrutar de la naturaleza y del valle como siempre", asegura Alain López, presidente Asociación de Empresarios Turísticos de Cerler.


Sí ha sufrido pequeñas afecciones el camping Aneto, que también se encuentra incomunicado, pero los daños han sido mínimos: el agua tan solo se ha llevado un parque infantil y las barbacoas. “A las parcelas ni siquiera ha llegado el agua y todos los servicios se encuentran en funcionamiento, desde el supermercado hasta el restaurante, está todo perfecto”, asegura Elena, dueña del negocio. “En cuanto arreglen los accesos, estamos preparados para recibir visitantes”, indica.