En Fraga

El Plan de Gestión Social de la Vivienda promueve la rehabilitación de viviendas de camineros en Fraga

La concesión será por un plazo de 35 años pero con la posibilidad de acordar prórrogas sucesivas por periodos de diez años.

El Departamento de Obras Públicas, Urbanismo, Vivienda y Transportes del Gobierno de Aragón ha comenzado a dar uso a las antiguas viviendas de peones camineros, a través de una convocatoria de concesión demanial para la rehabilitación y posterior puesta en uso de cuatro viviendas de peones camineros en la localidad de Fraga. 


La directora general de Vivienda y Rehabilitación del Gobierno de Aragón, Belén Corcoy, junto con el director general de Carreteras, Miguel Ángel Arminio y el delegado territorial del Gobierno de Aragón en Huesca, José Luis Moret, han visitado estas viviendas.


En su día sirvieron de residencia para las brigadas de conservación y demás personal adscrito a la Dirección General de Carreteras y que ahora van a ser recuperadas a través de esta iniciativa puesta en marcha por el Ejecutivo.


Belén Corcoy ha explicado que esta iniciativa está enmarcada en el Plan de Gestión Social de la Vivienda, "que es la prioridad esencial de la Dirección General de Vivienda y del Departamento de Obras Públicas, y se está pensando que tras este proyecto se inicie la rehabilitación del resto de viviendas de peones camineros que estén vacias y, por ello, se están iniciando algunos trámites para poder proceder a su desafectación para poderlas destinar a fines sociales".


Con ese objetivo se trabaja en otros cuatro viviendas de Fraga, así como en inmuebles de las localidades de Borja, Calamocha y Calatayud.


Mantener las viviendas


Por otro lado, el director general de Carreteras, Miguel Ángel Arminio, ha añadido que además del uso social que se les va a dar va a servir "para que estos parques de viviendas se mantengan, ya que unas viviendas vacías lo único que hacen es degenerar el entorno, e incluso para los propios trabajadores de carreteras que ocupan algunas de ellas, no es lo mismo estar rodeado de viviendas ocupadas que vacías".


A su vez, el delegado territorial, José Luis Moret, ha subrayado la importancia de esta medida "para dar salida a muchos problemas que se están generando en el actual entorno social".


Así, esta concesión demanial conferirá a la entidad que resulte adjudicataria el derecho de uso privativo y temporal de los inmuebles, para su rehabilitación y puesta en uso, conservando la Comunidad Autónoma de Aragón la titularidad de los bienes con adscripción del Departamento de Obras Públicas.


La concesión será por un plazo de 35 años pero con la posibilidad de acordar prórrogas sucesivas por periodos de diez años hasta alcanzar un límite máximo de 75 años.


Según las cláusulas de la convocatoria publicada en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) el pasado 9 de abril podrán optar a esta concesión las entidades locales sin ánimo de lucro cuyo objeto social sea la prestación de servicios sociales relacionados con las necesidades de las personas que residen en Aragón, como problemas de integración social, convivencia adecuada, necesidades básicas, autonomía personal y participación social.


De esta forma, el Gobierno aragonés impulsa el proceso para la puesta en uso de estas viviendas del parque de maquinaria, ahora deshabitadas, que en su día sirvieron de residencia para las brigadas de conservación y demás personal adscrito a la Dirección General de Carreteras.


Estas viviendas de Fraga fueron construidas en el año 1960, en el número 200 de la avenida de Aragón. Cada una de ellas cuenta con una superficie total construida es de 133 metros cuadrados, incluyendo una zona de jardín de 51 metros cuadrados en su parte posterior. Todas se componen de planta baja con salón, cocina y un dormitorio, y una planta alzada con otros tres dormitorios y un baño.


Las entidades sociales sin ánimo de lucro interesadas deben presentar un Proyecto de Rehabilitación de las viviendas y un Proyecto Social en el que desarrollen las actividades y prestaciones que llevarán a cabo, junto con el Plan de Organización.


El uso de las viviendas estará dirigido a la atención integral de personas en situación de exclusión social e implicará la rehabilitación inicial de las viviendas y la posterior conservación y mantenimiento, incluyendo los trabajos de reforma y reparación que para ello sean exigibles.


En todo caso, la utilización de las viviendas deberá respetar, además del clausulado que rige esta convocatoria, las normas urbanísticas y las de carácter medioambiental.