La Policía Nacional ha detenido en Arganda del Rey (Madrid) a cinco presuntos miembros de una banda especializada en asaltar establecimientos comerciales y a la que se atribuyen al menos nueve robos perpetrados por toda España, alguno de ellos en León, con los que obtuvieron más de 230.000 euros.

Los miembros del grupo, de nacionalidad rumana, no residían de manera continua en España y solo acudían a nuestro país para cometer los delitos, explica la Policía en una nota de prensa.

La investigación se inició el pasado mes de noviembre cuando se tuvo conocimiento de que una banda de ciudadanos rumanos había cometido tres robos en el interior de dos estancos de la localidad de Jaca.Robos por todo el país

Tras las primeras pesquisas, los agentes averiguaron que esta banda se dedicaba a cometer asaltos por todo el territorio nacional.

Para la comisión de las sustracciones empleaban inhibidores de frecuencia para inutilizar los sistemas de seguridad; gatos hidráulicos para forzar las paredes y acceder al interior de los comercios; y walkie-talkies en sus comunicaciones.

Además, para los desplazamientos usaban vehículos de alquiler así como otros automóviles propiedad de nacionales rumanos ajenos a los robos.

Una vez obtenida toda la información relativa al "modus operandi" utilizado, e identificados los componentes del grupo, comenzaron las gestiones para localizarles.

Finalmente, tras cometer un asalto en un distribuidor oficial de una prestigiosa marca de productos informáticos de San Sebastián, y cuando la banda regresaba al domicilio que habitaba en Arganda del Rey, los investigadores procedieron a su detención.El recorrido

Hasta la fecha se atribuye a los detenidos la comisión de nueve robos perpetrados en estancos, comercios de hostelería y otros establecimientos de Jaca, Lleida, Mejorada del Campo, León y San Sebastián.

Entre los efectos intervenidos tanto en la vivienda de los arrestados -situada en Arganda del Rey- como en una nave situada de esta misma localidad, figuran cuatro inhibidores de frecuencia con sus respectivas antenas y mandos a distancia, un gato hidráulico, un extractor de bombines, ocho equipos de radio transmisión, 1.000 euros en efectivo y dos vehículos.

Asimismo se recuperó gran cantidad de material informático y telefonía móvil, valorado en más de 150.000 euros, procedentes de su último golpe.

La investigación ha sido realizada por el Grupo I de la Sección de Países del Este de la UDEV Central y el Grupo de Policía Judicial de Jaca.