E. J. T. C., funcionario, vive con su mujer y su hija, y asegura que su vida ha cambiado "totalmente" con la crisis. Enumera los recortes que han hecho en su familia:

"En 2012 no hemos salido de vacaciones. En Navidad no ha habido ni regalos de Reyes ni de Papá Noel. No hemos comprado ni turrones ni cava ni vinos.

Las 'comidas de fiesta' son iguales que las de un día normal. Ya no salimos a cenar fuera de casa ningún día o a comer fuera algún domingo. No hacemos excursiones de domingo (ahorramos gasolina, coche y comer fuera de casa).

La calefacción solo la encendemos un rato por la tarde-noche para que se caldee la casa (nos estamos haciendo más resistentes al frio).

Hemos reducido al 50% las veces que vamos a la peluquería mi mujer, mi hija y yo.

No compramos el periódico.

Este año no nos hemos comprado ropa ni mi mujer, ni yo (solo hemos comprado ropa para la hija). En 2012 yo no me he comprado zapatos ni ningún otro tipo de calzado. Hemos dejado de utilizar colonias/perfumes "caras" y hemos cambiado a marcas más baratas.

Hemos incrementado la compra de marcas blancas en alimentación (Hacendado, Día) fundamentalmente frente a los productos de marca 'de toda la vida'."

Y anuncia sus planes para el 2013: "De momento el planteamiento va a ser el mismo".