El edificio de la residencia Juan Bonal de Almudévar cierra sus puertas este mes

El edificio de la residencia Juan Bonal, ubicado en Almudévar, cierra sus puertas durante este mes de septiembre, poniendo así fin a los 120 años de presencia de la congregación de Santa Ana en esta localidad oscense.

El párroco de Almudévar, Paco Raya, ha asegurado que buena parte de los vecinos han tenido gran vinculación con la congregación, por ello el pueblo despedía en una misa este fin de semana a las hermanas que abandonan el municipio.

"Hasta el año 70, era prácticamente la escuela del pueblo, a la que iban los niños y las niñas del pueblo, por eso es algo como muy suyo y el sentimiento de su marcha produce dolor en la localidad", ha manifestado Raya.

En la actualidad, residen en la localidad ocho hermanas mayores y cuatro más jóvenes. La edad de las religiosas más mayores que supera los 70 años es la razón fundamental por la que se plantea el traslado de estas residentes y durante este mes de septiembre se trasladarán a otras comunidades, mientras que las cuatro más jóvenes seguirán desarrollando su labor en la atención a inmigrantes.

El edificio cerrará sus puertas, pero la Fundación Juan Bonal seguirá activa dando acogida y alimento a personas inmigrantes o en exclusión social, además de organizando talleres ocupacionales.

No es el único grupo de hermanas de Santa Ana que abandonan la provincia, ya que otro grupo de hermanas se despidió a mediados del mes de agosto de Jaca después, tras 133 años de presencia en la capital jacetana.