CHA ha mostrado su preocupación por la aparición de residuos tóxicos del pesticida lindano en el tramo en obras de la A-23 comprendido entre los accesos este y oeste de Sabiñánigo, al entender que supondrá "un evidente retraso" en su ejecución.

El secretario territorial de CHA en el Alto Aragón, José Ramón Ceresuela, ha explicado a EFE que el diputado por la coalición la Izquierda de Aragón, Chesús Yuste, preguntó en el Congreso por el estado de este tramo de la autovía A-23.

A este respecto, ha recordado que de los diez en los que se dividió la obra entre Nueno y Jaca sólo está en servicio el que une Sabiñánigo y Jaca mientras que el resto se encuentran en obras a "excepción del tramo de 6,9 kilómetros Sabiñánigo Este-Sabiñánigo Oeste".

La respuesta recibida "hace dos o tres días" es que dicho tramo "continúa con el proyecto de redacción, con un coste de 1.168.340 euros, ante la aparición de lindano" y que será necesario "un nuevo procedimiento ambiental y una nueva Información Pública".

Ante esta repuesta, CHA ha vuelto a formular una batería de preguntas al Gobierno Central para conocer "de dónde procede ese lindano, si se ha informado de su aparición al Ayuntamiento de Sabiñánigo y otros datos que puedan aportar luz" sobre este hecho, ha indicado Ceresuela.

Además se plantea formular también preguntas al Gobierno de Aragón dado que en materia de medio ambiente "también tiene competencia", ha dicho.

Ceresuela ha insistido en que este hecho "retrasará la obra" e impedirá a corto plazo "concluir la autovía A-23 entre Nueno y Jaca".