CENTRO DE INTERPRETACIÓN

Broto homenajea a los ganaderos con un centro expositivo en el antiguo molino

Se han invertido alrededor de 100.000 euros para reconvertir y adaptar el edificio en un espacio cultural.

Las autoridades en la sala abovedada del museo, que simula un antiguo establo.
Broto homenajea a los ganaderos con un centro expositivo en el antiguo molino
PABLO OTíN/DPH

Un homenaje a la memoria de los ganaderos y al trabajo que todavía se realiza en el valle Broto en este sector. En esto pretende convertirse el Centro Interpretación de la Ganadería que se inauguró ayer, con motivo de la celebración de la feria ganadera. El centro, ubicado en un antiguo molino de trigo de propiedad municipal, supone la culminación a unos trabajos que comenzaban en 2005 con la rehabilitación del edificio y que han terminado convirtiéndolo en espacio expositivo tras una inversión de 100.000 euros.


«Es un ejemplo de cómo impulsar la economía local y aprovechar los recursos del territorio en una iniciativa pública», afirmó el presidente de la Diputación de Huesca, Antonio Cosculluela, durante la inauguración, acto en el que estuvo acompañado de la alcaldesa de Broto, Carmen Muro, el diputado provincial y presidente del Cedesor, Antonio Escalona, el presidente de la Comarca del Sobrarbe, Enrique Campo, y el resto de los miembros de la corporación municipal.


Este antiguo molino de trigo, de propiedad municipal, según cuentan los historiadores de la zona, podría haber albergado un castillo medieval. La céntrica sala abovedada se ha rehabilitado y en la actualidad adentra al visitante en un espacio que simula un establo. Se crea con este centro una exposición permanente, disponible tanto para habitantes del valle como para los turistas y los grupos de escolares, en la que a través de paneles explicativos y un audiovisual, se da a conocer la historia del valle ligada a la ganadería y otros elementos que acompañan a la actividad, como es el caso de los tipos de cencerros que se pueden utilizar.


A todo ello hay que sumar una reproducción de una vaca parda del Pirineo a tamaño natural y una antigua rastrillera de paja, además de mostrar los utensilios que se utilizaban y que han sido recuperados por los vecinos del valle, como las antiguas marcas de ganado de hierro.