HUESCA

Los agricultores temen que la falta de agua reduzca las producciones de maíz y de alfalfa

UAGA y Asaja dicen estar "preocupados" porque si no llegan las lluvias, comenzarán la cosecha de 2012 con los embalses vacíos. La comunidad de Riegos del Alto Aragón aumentará los prorrateos la próxima semana.

Una plantación de maíz de Peralta de Alcofea retrasada por el calor.
Los agricultores temen que la falta de agua reduzca las producciones de maíz y de alfalfa
J. BLASCO

"Creíamos que con los prorrateos íbamos a poder concluir la campaña sin muchos problemas, pero si no remite la ola de calor, vamos a llegar con la lengua fuera". Esta es el expresivo cálculo que hizo ayer David Solano, secretario provincial de UAGA en Huesca. Y es que aunque la situación del campo altoaragonés no es para nada comparable a la sequía de 2005, la falta de lluvias de los dos últimos meses, unido al continuado ascenso de las temperaturas de agosto, han puesto en alerta a los agricultores de la provincia, que temen que se reduzcan las producciones de las segundas cosechas de maíz y los últimos cortes de alfalfa.

Para evitar males mayores, los agricultores del sistema de Riegos del Alto Aragón se han visto obligados a aplicar restricciones. Desde el 15 de agosto limitan el consumo de agua un 10% y a partir del día 28 estos prorrateos se irán incrementando cada semana hasta llegar al 60% en octubre.

Los agricultores confiaban en que a mediados de septiembre se pudiera retirar ya el agua a las primeras cosechas de maíz y al arroz para dedicarla por completo al maíz de ciclo corto y a la alfalfa, pero el calor de este mes ha retrasado el crecimiento «y nos han trastocado los planes», reconoció David Solano, de UAGA.

El 80% del riego, completado

Su homólogo de Asaja, José Fernando Luna, coincidió en asegurar ayer que si la meteorología no cambia «puede haber problemas para los últimos riegos de la campaña». No obstante, también dejó claro que aunque puede haber casos «puntuales» de agricultores que se queden sin agua para poder terminar el ciclo, «en general llegará para finalizar todos los cultivos porque a estas alturas ya se ha completado el 80% del riego».

Para Solano, el daño económico puede ser mayor en el maíz. «La alfalfa tiene la ventaja de que son cinco cortes y lo que a lo mejor puede pasar es que el último sea mediano, lo cual económicamente es un problema llevadero. Pero si al maíz le falta el riego a última hora, la cosecha puede ser desastrosa», destacó. Por ello, vaticinó que «no será un buen año para el maíz de segunda cosecha».

Desde Asaja consideran que la situación, de momento, no es alarmante, pero sí preocupante «porque hay que aprovechar muy bien la poca agua que queda y porque vamos a empezar la siguiente cosecha con los embalses vacíos y si no llueve en invierno, sí sería una campaña similar a la de 2005, que ya no nos dejaron sembrar», afirmó Fernando Luna. En este sentido, el responsable provincial de UAGA también cree que el principal problema «lo estamos dejando para el año que viene».

Así las cosas, los agricultores no se cansan de mirar al cielo anhelando que llegue la lluvia «porque si cayera alguna tormenta de 20 litros, se podría dejar de regar tres días y eso ahora mismo se notaría muchísimo ya que, además, la noche es más larga y no se necesita tanta agua», señalan.

Como usuarios de Riegos del Alto Aragón admiten que las restricciones de agua son habituales cada 5 o 6 años «porque es un sistema deficitario». Y recuerdan que aunque en el Canal de Aragón y Cataluña están más acostumbrados que ellos a los prorrateos, «ellos tienen la ventaja de que San Salvador está en construcción con lo que igual dentro de 3 años se olvidan de los prorrateos para siempre», dijo Solano.