FIESTAS DE HUESCA

El concierto de San Lorenzo se hará fuera del quiosco por primera vez en 26 años

La Banda de Música de Huesca actuará el 13 de agosto en el escenario de las jotas porque el templete está pendiente de obras.

El quiosco de la música está vallado y pendiente de que comiencen las obras de urgencia.
El concierto de San Lorenzo se hará fuera del quiosco por primera vez en 26 años
JAVIER BLASCO

El mercadillo que se instalaba en la calle del Parque y que este año se ubicará en el paseo de Ramón y Cajal no es la única actividad de las fiestas de San Lorenzo que cambia de sitio. La Banda de Música de Huesca también debe modificar el escenario de su tradicional concierto del día 13, que durante 25 años ha tenido lugar en el quiosco del parque de Miguel Servet, ahora cerrado.


La pequeña construcción permanecerá clausurada hasta que después del verano pueda ejecutarse la rehabilitación de la techumbre, en cuyo interior se produjeron hace varios meses algunos desprendimientos. En principio, se colocó una lona de protección que permitió continuar utilizando el quiosco, pero en lso priemros días de julio se protegió con una malla perimetral que impide el acceso de personas.


Este lugar ha sido, desde 1985, el lugar donde la Banda de Música de Huesca ofrece el día 13 su concierto. El director, José Luis Sampériz, comentó que tienen dudas sobre cómo se tocará en el escenario de las jotas, que está en el paseo central del parque. «El techo del quiosco nos hace de caja de resonancia y eso nos beneficia», explicó.


El maestro Sampériz explicó que el escenario al aire libre tiene, por contra, alguna ventaja como es la amplitud de espacio para los músicos, que en el quiosco apenas pueden moverse.


Ante el cambio de condiciones, la banda ha elegido para este año un repertorio «más asequible, con piezas menos delicadas» del que forman arte una fanfarria, temas rusos y composiciones modernas. Para terminar se ha elegido 'Gigantes y Cabezudos' de la zarzuela del mismo nombre.


Sampériz confía, además, en que el 13 de agosto no haga viento que distorsione las notas ni mucho calor, que secaría la boca de los músicos de viento. Será, por tanto, una nueva prueba para la Banda de Huesca, que el año pasado celebró su 25 aniversario y que es uno de los elementos imprescindible de la fiesta. Su música está presente en todos los actos laurentinos, pero el concierto del día 13 es especial porque se trata de un momento exclusivo para sus componentes.