La cuadrilla helitransportada de Boltaña ya tiene permiso de vuelo y luz eléctrica

El retén de Boltaña ya puede realizar desde ayer sus labores como base helitransportada al contar con el permiso de vuelo para el helicóptero y luz eléctrica. Por fin está plenamente operativa tras los problemas de enganche al suministro, que le han obligado desde su inauguración y los meses que sirve de base para el helicóptero un grupo electrógeno.

Los trabajadores de la empresa de Sodemasa, adscrita al departamento de Medio Ambiente, y el correspondiente agente de protección de la naturaleza de Boltaña deberían haber comenzado sus tareas en la extinción de incendios como base helitransportada el pasado 1 de junio. Sin embargo, la empresa contratada para la gestión de los helicópteros retrasó un mes la llegada de este transporte hasta principios de julio. Según fuentes consultadas, la causa de la demora se debe a un accidente en Burgos. Desde entonces, tanto el helicóptero como su tripulación, procedente de Chile, han estado en la base sin poder volar al no contar con los permisos.

Este hecho obligó a desplazarse al medio de Bailo al pequeño incendio que se produjo el pasado domingo en Mediano, donde se quemaron dos hectáreas y media de cereal. Con la entrada en funcionamiento del helicóptero, los trabajadores permanecerán en la base a la espera de avisos de incendio, frente al trabajo de campo que han realizado desde marzo cuando se inició este retén.

Además, la base de Boltaña inaugurada en junio del año pasado ya está preparada para recibir la luz eléctrica, tras un largo proceso de negociación entre el departamento de Medio Ambiente y la empresa propietaria del enganche. Durante los meses del verano pasado y desde principios de junio, la base disponía de un grupo electrógeno que le suponía a la administración unos 12.000 euros anuales. Ayer se esperaba la llegada de la persona encargada de realizar el enganche y que se retirara el grupo electrógeno que fue necesario alquilar. La causa era que no se alcanzó un acuerdo entre la cantidad que la empresa eléctrica Endesa solicitaba a la administración durante el alta de suministro por «derecho de resarcimiento».