INFRAESTRUCTURAS

Los alcaldes dudan de que la Pamplona-Huesca esté terminada en 2014, como exigió el Senado

Con varios tramos parados por la crisis y otros aún sin empezar, critican la «falta de voluntad» del Gobierno.

El tramo entre Sabiñánigo y Jaca (en la imagen a su paso por Espuéndolas) está casi concluido.
Los alcaldes dudan de que la Pamplona-Huesca esté terminada en 2014, como exigió el Senado
RAFAEL GOBANTES

Satisfacción, pero sobre todo mucho escepticismo. Los alcaldes de los municipios del trazado de la autovía Pamplona-Huesca tienen pocas esperanzas de que surta efecto la moción aprobada esta semana en el Senado que exige al Gobierno agilizar su ejecución y concluir como máximo en 2014 todos los tramos pendientes de este eje fundamental para el desarrollo de la provincia y de los territorios limítrofes.


La propuesta fue presentada por el PP, que acusó a Fomento de incumplir el acuerdo con Navarra para impulsar la A-21, que en la Comunidad Foral -con competencia directa en las obras- está casi concluida, mientras en Aragón las obras apenas avanzan, sobre todo desde que los recortes del plan de ajuste del Ministerio paralizaran varios tramos hace casi un año.


Entre los más críticos con la situación se encuentran precisamente los alcaldes de los municipios afectados más próximos a la muga navarra, quienes aseguran que solo será posible cumplir los nuevos plazos «si hay dinero y voluntad», algo que dudan.


Ramón Lobera, recién elegido alcalde de Puente la Reina por el PP, calificó la exigencia de terminar en 2014 de «utopía», porque «va a costar un montón de años». «Casi nos hemos olvidado ya -reconoció- de la autovía», puesto que las máquinas dejaron de trabajar en esta zona hace casi un año.


Desde Santa Cilia, Manuel Máñez (CHA), consideró que «lo propuesto es interesante», pero se mostró «escéptico» respecto a su cumplimiento. Desde que se paralizaron los trabajos, explicó, «lo único que están haciendo son pequeñas mejoras para dejarlo completamente abandonado, como arreglar caminos que se habían quedado destrozados, más que nada por hacernos callar, porque creo que la cosa va para largo».


«Es una pena que no avance porque parte del futuro de la comarca y de la región pasa por esta autovía», añadió, al tiempo que recordó que los dos tramos que atraviesan su municipio, hacia Puente la Reina y hacia Jaca, estaban «a mitad de ejecución» y se preveía que estuvieran finalizados en 2013. El primero está parado y en el caso del segundo se ha rescindido el contrato, por lo que la actividad es nula en ambos, a la espera de que se concrete la fórmula propuesta de colaboración con la iniciativa privada. «Desde que se anunciaron los recortes solo hemos oído mentiras del ministro y del secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán», lamentó Máñez.


En Jaca también preocupan los retrasos, por lo que su nuevo alcalde, el popular Víctor Barrio, urgió al Gobierno a «buscar una fórmula para que las obras se retomen cuanto antes porque es una infraestructura que se necesita urgentemente». Además, criticó que «no sirve de nada avanzar las obras en un tramo si el siguiente no está ni empezado». En su caso, la variante ni siquiera se ha licitado -también se plantea un contrato público privado-, mientras los 10 kilómetros entre Jaca y Sabiñánigo están a punto de finalizarse, y el último plazo que dio Morlán, tras varias fechas incumplidas, es abrirlo «en septiembre u octubre».


Proyectos hipotecados


«Ojalá esté en 2014, pero lo veo difícil por los recortes económicos y la falta de voluntad del Gobierno», comentó el edil jaqués, quien destacó que la demora hipoteca varios proyectos de la ciudad, como la reordenación del tráfico en el centro o el polígono industrial de Martillué, junto a la autovía.


Precisamente el siguiente tramo, la variante de Sabiñánigo, es el más retrasado, ya que ni siquiera se ha licitado. En los kilómetros que siguen hacia Huesca hay dos contratos rescindidos, si bien en el puerto de Monrepós, en los tramos entre Lanave y Arguis, sí se trabaja actualmente. Precisamente el alcalde serrablés, Jesús Lasierra (PSOE), tiene previsto reunirse en breve con los responsables de Fomento en Aragón para conocer de primera mano «como está la situación». Opinó que la moción aprobada en el Senado «es un paso para agilizar la autovía, que ojalá se termine cuanto antes».


Su homólogo de Caldearenas, el socialista Sergio Usieto, considera que «está complicado terminar en 2014, según están las cosas. El túnel que cruza el puerto no está previsto acabarlo al menos hasta 2015 y, como tarde en 2018, pero si no paran y siguen a buen ritmo, puede ser». De momento, las obras siguen y el tramo Caldearenas-Lanave «está bastante avanzado», igual que el Arguis-Monrepós.


Eso sí, el siguiente hasta el congosto del Isuela está parado. «El túnel y las bocas de salida de emergencias se tapiaron y nos dijeron que igual tardaban dos o tres años en volver», comentó el alcalde de Arguis, Sergio Lanaspa, para quien la llamada de atención a Fomento «es una buena noticia porque cuando dejaron la obra se vio un poco negro y ahora esperamos que se pueda reanudar».


Más claro parece el futuro del último tramo antes de enlazar con la A-23, en Nueno, donde continúan los trabajos y ya hay dos kilómetros abiertos.