NUMEROSA AFLUENCIA

El planetario dejó asombrados a los miles de visitantes que ayer acudieron al preestreno

El observatorio volvió a cerrar hasta el 8 de julio, cuando se ofrecerá otra actividad. El equipamiento interior está pendiente de completarse para inaugurarlo tras el verano.

Se instalaron telescopios en la explanada para poder contemplar el eclipse.
El planetario dejó asombrados a los miles de visitantes que ayer acudieron al preestreno
J. BLASCO.

Éxito sin precedentes. Nunca el preestreno de unas instalaciones había atraído a tanto público como la jornada de puertas abiertas que hubo ayer en el planetario de Huesca. Centenares y centenares de personas hicieron largas colas para participar en la visita guiada por miembros voluntarios de la Asociación Astronómica Oscense. En total, mas de 4.500 personas, niños y mayores, disfrutaron del recorrido y después pudieron ver el eclipse lunar a través de los grandes telescopios instalados en los jardines de Walqa.


Antes fue el turno de las autoridades. El consejero de Industria, Comercio y Turismo, Arturo Aliaga y la alcaldesa de Huesca, Ana Alós encabezaron el grupo de representantes institucionales y de empresas que habían sido invitados especialmente a conocer el planetario, construido por el Instituto Aragonés de Fomento a propuesta de la Agrupación Astronómica. Fue solo un día. El planetario volvió a cerrar y solo se reabrirá el 8 julio para otra actividad, según dijo Alberto Solanes, responsable de la Agrupación. Habrá que esperar a después del verano para su inauguración definitiva.


El 'gran ojo', puerta de entrada al recinto, recibió a los visitantes en la gran sala principal presidida en el centro por un gran globo terráqueo en medio de un cielo estrellado, reproducción del que se ve desde Huesca. A la derecha, el mostrador de recepción, una pequeña tienda en la que se pondrán a la venta recuerdos, libros y objetos relacionados con la astronomía, consigna y varios espacios de trabajo. A la izquierda se encuentra la sala del simulador donde se proyectarán películas en 4D, y de la que ayer disfrutaron los primeros visitantes, y aulas para talleres y actividades didácticas. Desde ellas se pasa al observatorio donde irán los telescopios. Se trata de un 'patio inglés' que, según explicó el arquitecto que ha diseñado el edificio, Juan Ignacio Lacarte, es un espacio situado bajo el nivel de calle con una cubierta que deja pasar la luz e ilumina las salas anteriores. Además, esta cubierta es deslizante para permitir el visionado desde los telescopios.


Para diseñar su proyecto, Lacarte tuvo que contar con que la parcela estaba situada 4 metros por encima de las calle perimetrales «lo que obligaba a hacer un vaciado para aprovechar mejor el terreno». Así, la mayor de las instalaciones se encuentran soterradas y tienen luz cenital. También quiso diseñar un edificio «emblemático y expresivo de su contenido y surgió la idea de hacer un espacio abovedado», dijo Lacarte. Su aspecto exterior recuerda un ojo que observa el espacio. Para completar esa impresión, la fachada se ha dotado de unas lamas, a modo de párpado, que lo oscurecen y protegen del sol.


Bajo el globo terráqueo se encuentra el propio cine del planetario. Hasta allí se accede a través de una rampa que va rodeando la esfera terrestre y que invita a soñar que se está en una nave espacial desde la que se ve la tierra y el espacio. Esta instalación está pendiente de completarse y, según Aliaga el 7 de julio se resuelve el concurso de adjudicación.