SD HUESCA

Otra final en El Alcoraz

El estadio volverá a ser escenario de un choque decisivo como en años pasados fueron los del Cádiz, Écija, Córdoba o Palencia. Los jugadores piden calor en el esfuerzo final

Todos los caminos conducen a jornadas como la de hoy. Victorias y derrotas, decepciones y sorpresas convergen en un grito liberador cuando se consigue el objetivo por el que se lleva trabajando desde el mes de julio. Los finales de temporada pasan factura y el Huesca ha salido bien parado en los últimos años. El club azulgrana ha ido a alegría por curso, o casi, desde su último ascenso a Segunda B en 2004. Siempre ha habido una cúspide en El Alcoraz, como sucede hoy con el Villarreal B y antes con el Cádiz, el Sevilla Atlético, el Écija, el Córdoba o el Palencia. Aquel ascenso en Éibar supuso un éxito nimio en relación con Écija y, sobre todo, con lo que ahora se lleva entre manos, pero se sitúa en la base del equipo azulgrana y su paso por la categoría de plata.


Hablar de que hoy puede resolverse todo es un lujo y la prueba de la solvencia del proyecto piramidal que cuenta en sus diferentes niveles con unos futbolistas muy competentes y unidos, la labor del técnico Onésimo Sánchez y el buen hacer de la dirección deportiva. Nubes muy negras aparecían en el cielo de hace un año; el Huesca se salvó gracias a esas victorias postreras sobre Cádiz -que se festejó casi como una salvación matemática- y Celta. En la temporada del debut, y pese al bajón final, la victoria del Celta sobre el Alavés en la antepenúltima jornada permitió apagar la calculadora antes de que se jugara con el filial sevillista.


Otro filial, que también quiere amarrar la salvación, ofrecerá resistencia a los oscenses, conscientes de que no hay nada que celebrar, si acaso, hasta las ocho de la tarde. Lo sabe también uno de los que menos tiempo llevan en el vestuario, el gallego Toni Rodríguez, que hoy apunta a titular «con muchas ganas de jugar», afirmaba ayer que «en los últimos meses el equipo ha estado muy sólido, con más o menos acierto, tenemos una oportunidad de oro para certificar de una vez por todas la permanencia, que es nuestro primer objetivo. Si lo consiguiéramos, diría mucho de la temporada que está haciendo toda la plantilla». No hay partidos de trámite para futbolistas que han de definir su futuro. «Somos ambiciosos, y en mi caso queremos seguir haciéndonos un hueco en el fútbol profesional. El aficionado no puede tener ninguna duda. Sabemos que no es fácil, pero el entrenador no quiere relajación y el que nos vea entrenar sabe que trabajamos como animales».


Aunque la dinámica del Villarreal B no ha sido positiva en las últimas jornadas, Toni recela de ellos. «Tienden a la irregularidad por su juventud, pero tienen calidad y son jugadores de primer nivel que nos pueden complicar las cosas. Les gusta tener el balón, combinar y el juego en corto», señalaba el mediapunta cedido por el Celta de Vigo.