TRÁFICO

Nueve carreteras autonómicas suman hasta 17 zonas peligrosas en toda la provincia

El Plan de Seguridad Vial anunciado recientemente por el Gobierno de Aragón analizará su estado para mejorarlo.

Una gran señal alerta a los conductores de que entran en un tramo de concentración de accidentes. En estos momentos, hay diecisiete puntos negros, la mayoría señalizados, en nueve carreteras autonómicas de la provincia. Una de esas señales, la de la A-129 de la travesía de Lanaja, ya tiene que retirarse porque en breve se acabará la reforma con la que se ha pasado de una calzada de 6 a 9 metros en la que además hay aceras. Cambios de estas características serán necesarios en otras carreteras autonómicas cuando se ponga en marcha el Plan de Seguridad Vial anunciado recientemente por el Gobierno de Aragón, con el que se quiere llegar a actuar en 2.400 kilómetros de la red autonómica entre 2011 y 2012.


En la provincia de Huesca, las zonas de concentración de accidentes suman 28, 5 kilómetros en nueve vías diferentes repartidas por toda la provincia. Según el plan, la situación de estas carreteras se auditará para aplicar una serie de medidas encaminadas a mejorar la seguridad vial. De hecho, en estas carreteras los accidentes se producen por distintos motivos: por curvas, por ser demasiado estrechas, por la formación de hielo o por el paso de animales.


Con diferencia, la más peligrosa es la A-131 entre Huesca y Fraga, con cinco puntos negros. Cuatro de ellos se concentran en 30 kilómetros entre la capital y Sariñena. Por el proyecto Red del Gobierno de Aragón, se trabaja ahora en la mejora del firme pero los vecinos achacan el peligro a la estrechez de la carretera que dificulta en muchos puntos el cruce de dos vehículos pesados.


La siguiente vía con más puntos es la A-1234 entre Fraga y Albalate de Cinca, con un total de 3,9 kilómetros de peligro. Uno de los puntos está en Albalate, otro entre dicha población y Alfántega y un tercero en Pueyo de Santa Cruz. Para la alcaldesa, Sagrario Sender, hay como pequeños cambios de rasante. No obstante, la edil resalta que se ampliaron la calzada y el arcén recientemente y que los incidentes que se producen están causados principalmente por el paso de jabalíes. En este caso, la medida para mejorar la seguridad vial tendrá que ser distinta.


En el Pirineo, las autonómicas con más zonas peligrosas son la A-138 que comunica Somontano, Sobrarbe y conecta con Francia por el túnel de Bielsa así como la A-136 entre Biescas y Francia por Portalet. En el primer caso, la falta de seguridad se relaciona directamente con el trazado, ya que en los dos puntos de Ligüerre y Mediano coincide con zonas de curvas en la que la velocidad tienen que reducirse considerablemente. En el caso de la A-136, el hielo es el que provoca en invierno los accidentes. En otros casos, como la A-140 entre Binéfar y Tamarite, los siniestros acostumbran a ser salidas de vía por exceso de velocidad en una recta. El nuevo plan analizará las soluciones.