Las previsiones meteorológicas se cumplieron y la nieve aprovechó la tregua que dio el termómetro para teñir media provincia de blanco. Atrás quedaron los nueve grados bajo cero que los pasados días se registraron en Cerler y con temperaturas más cálidas, entorno a los cero de mínima, llegaron las precipitaciones invernales. Las comarcas pirenaicas más orientales, Sobrarbe y Ribagorza, fueron las más afectadas con una decena de rutas escolares suspendidas, pero también hubo nevadas en Alto Gállego, Jacetania e incluso en poblaciones de la Hoya de Huesca como Loarre o Murillo. Para hoy continúa la prealerta, con la cota de nieve bajando de los 1.000 hasta los 500 metros otra vez.

Con -2,3 grados, Benasque fue una de las poblaciones en las que más cayó el mercurio si bien la mínima de todo Aragón la marcó la vecina Cerler con -5,4. No obstante, la temperatura queda lejos de los diez bajo cero de jornadas anteriores, lo que favoreció la aparición de la nieve, un manto blanco que acompañó el despertar de los ribagorzanos de norte a sur. No obstante, conforme avanzaba la mañana fue desapareciendo en las cotas más bajas al ser sustituida por una persistente lluvia. Pero en las zonas medias y altas de los valles de los ríos Esera, Isábena y Noguera Ribagorzana la nevada se mantuvo y se alcanzaron espesores de hasta 20 centímetros.

También en Sobrarbe la nieve se presentó desde primeras horas de la mañana complicando la circulación y obligando, como en Ribagorza, a suspender varias rutas escolares. Entre ambas comarcas, alrededor de 240 escolares no pudieron llegar a clase por las complicaciones de la meteorología. Mientras que en Alto Gállego y Jacetania, según informó la consejería de Educación, no fue necesario suspender ninguna ruta si bien la nieve también cayó durante buena parte de la mañana tanto en estos territorios como en la Hoya.

El constante ir y venir de las quitanieves de Fomento y DGA por las carreteras no impidió que las cadenas fueran obligatorias en varios puertos de montaña y que la nieve dificultara la circulación en más de 300 kilómetros del Alto Aragón. También los servicios de Protección Civil de la Hoya y Ribagorza trabajaron a destajo durante toda la mañana para limpiar los accesos a núcleos como Loarre, Murillo o Veri. A última hora de la tarde, en la web de la Dirección General de Tráfico tan solo se alertaba de la presencia de nieve en los últimos nueve kilómetros del puerto de Somport (N-330), desde Canfranc hasta la frontera, y en el acceso a Portalet. No obstante, la Agencia Estatal de Meteorología mantiene hoy la prealerta por nevadas en el norte de la provincia.