Jorge Galán vive una situación inesperada en el Huesca. Cedido por Osasuna, equipo con el que debutó en Primera División, el delantero navarro se presentó como uno de los fichajes de relumbrón del equipo oscense, que ya quiso incorporarlo la temporada pasada. Después de ocho jornadas, Galán apenas supera los 200 minutos en Liga y solo ha sido titular en la visita al Rayo Vallecano, cuando Roberto se quedó fuera de la lista por una gastroenteritis.Galán no desespera. Sabe que solo ha transcurrido la quinta parte del campeonato. "Yo sigo trabajando; no queda otra que hacerlo, más aún si cabe, para intentar tener minutos", reconoció ayer el ariete, que el próximo mes de enero cumplirá 22 años.

Aunque no está satisfecho de cómo le van las cosas, el atacante azulgrana señala que no le da demasiadas vueltas a la cabeza sobre su situación. "No soy de comerme mucho el coco. Pienso que con el trabajo en el campo los goles llegarán y espero que sea pronto". "Uno siempre quiere disputarlo todo -continuó Galán-. Cuando no se juega no se puede estar contento".

Especialmente significativa fue su ausencia de la convocatoria para el encuentro de Jerez, hace diez días. El punta pamplonés admitió que "no hablé con Onésimo ni antes de ese partido ni después. No sé si fue un toque de atención, eso habría que preguntárselo a él, pero está claro que me vino bien para darme cuenta de que hay que apretar y seguir para delante".

Autocrítica no le falta a Galán. "Un jugador siempre piensa en cómo puede convencer al entrenador para jugar. Algo estaré haciendo mal si no estoy entrando. Físicamente me encuentro bien, porque aunque empecé a menos ritmo por una lesión aquello ya está olvidado".

Pese a que no es la situación que había imaginado, el delantero del equipo oscense no cree que se haya equivocado en su elección. "A lo hecho pecho. No me como la cabeza pensando en si me he equivocado o no al venir aquí. Solo puedo luchar al máximo".

La reacción del Huesca en la Liga, la recuperación de su armadura tradicional, se ha producido poblando el centro del campo con un trivote. Eso todavía pone más cara la titularidad en los puestos de ataque. "Siempre que se juegue con un delantero es más difícil entrar, pero yo estoy con todas las ganas del mundo de luchar por esa plaza".

Respecto al ambiente del grupo, los cuatro puntos de seis posibles en los dos últimos partidos han contribuido a reforzar la moral. "Hemos empezado a coger la confianza que le hacía falta al equipo".

Al asalto del Mini Estadi

Dar continuidad a este resurgir no será tarea sencilla en el Mini Estadi, donde espera un Barcelona B infalible como local hasta la fecha. "Es un rival muy complicado que lo ha ganado todo en su campo, pero afrontamos el partido con la máxima ilusión. No sé cuál es la fórmula para ganarles porque si la supiera la pondríamos en práctica y ya está. Lo que sé es que hay que luchar y correr el doble que ellos".