Siete fallecidos, seis heridos graves, diez leves y diecisiete ilesos fue el balance de un simulacro de emergencia realizado ayer por la noche en el túnel de Somport para comprobar un año más el funcionamiento del Plan de Socorro Binacional que tienen establecido las autoridades españolas y francesas en caso de accidente. El ejercicio, que fue satisfactorio y en el que participaron unas cien personas entre bomberos, sanitarios y personal de mantenimiento, obligó a cerrar el paso fronterizo de las 18.00 a las 23.30 desviando todo el tráfico por el puerto de Somport.

En esta ocasión, las autoridades decidieron efectuar el simulacro en esta fecha para evitar el cierre del túnel en verano, que es cuando más tráfico turístico soporta, y en invierno, que es cuando puedan existir problemas de circulación para los vehículos pesados por el puerto.

El accidente, que se produjo en la parte francesa del túnel, simuló una colisión de un turismo con un camión cargado con ácido clorhídrico. El siniestro provocó una nube tóxica que afectó a un tramo de un kilómetro en el que había un turismo y cuatro monovolúmenes con 30 víctimas, que fueron evacuadas por el personal de la empresa explotadora del túnel a dos refugios del túnel.

Tras recibir la llamada de la empresa, se activaron de inmediato los servicios de emergencia españoles y franceses. Las operaciones fueron dirigidas in situ por el Subprefecto de los Pirineos Atlánticos, Philipe Jamet, en coordinación con el Subdelegado del Gobierno en Huesca, Ramón Zapatero. En el caso de los servicios de emergencia españoles, fueron movilizados por el Gobierno de Aragón a través del 112.

Usaron el túnel ferroviario

Ante la imposibilidad de acceder a la zona del accidente, los servicios de emergencia españoles se desplazaron a la boca francesa a través del túnel ferroviario, que se usó también para la evacuación de los afectados hasta el Puesto Médico Avanzado.

En las operaciones intervinieron trabajadores de la empresa explotadora del túnel, bomberos del Alto Gállego y del Ayuntamiento de Jaca, que se integraron en el dispositivo francés establecido por el Servicio Interdepartamental de Incendio y Socorro, compuesto por 85 bomberos, que se hizo cargo de las labores para taponar la fuga tóxica.

Mientras, la asistencia sanitaria fue proporcionada por el SAMU francés apoyado por el 061 Aragón y Cruz Roja. Igualmente participaron miembros de la Guardia Civil y de la Gendarmería en las labores de seguridad, tráfico y reconocimiento de víctimas, y un asistente del Servicio Social de Base de la Comarca de Jacetania para hacer de enlace con sus homólogos franceses para movilizar los servicios españoles necesarios (Servicios Sociales de Base, la ERIE de Cruz Roja, SALUD, Colegio de trabajadores sociales y Colegio de psicólogos).

El objeto de los simulacros anuales es comprobar el funcionamiento de los mecanismos de alerta internos de la empresa explotadora, de los avisos a las autoridades de ambos países, la coordinación entre los servicios exteriores y el intercambio de información entre las autoridades españolas y francesas.