URBANISMO

Una ordenanza de solares y ruinas tratará de frenar la degradación urbana

La normativa, que el Ayuntamiento de Huesca quiere aprobar antes de final de año, incluirá la inspección técnica de edificios. Se exigirá a particulares y administraciones el cuidado de las parcelas sin edificar y se estudiará un 'uso social' para estos suelos.

El solar del antiguo edificio del Luces de Bohemia, en el Coso Bajo, se derribó a finales de 2008.
Una ordenanza de solares y ruinas tratará de frenar la degradación urbana
RAFAEL GOBANTES

Solares comidos por la vegetación, fachadas apuntaladas y vallas para proteger a los viandantes de posibles desprendimientos. Esta es la imagen que presentan los cosos de Huesca. La principal arteria económica y social de la ciudad sufre un deterioro que ni las inversiones del ARCH (Área de Rehabilitación del Casco Histórico) pueden frenar. En un intento de atajar esta situación y con el llamado Plan de los Cosos paralizado hace 12 años, el Ayuntamiento va a elaborar una ordenanza de solares, ruinas e inspección técnica de edificios que regirá para toda la ciudad.


El objetivo es que la normativa está aprobada antes de finales de este año, según ha comentado recientemente el alcalde, Luis Felipe. En estos momentos, los técnicos de Urbanismo están trabajando en la redacción de la ordenanza, cuyo principal escollo se encuentra en la necesidad de personal para aplicarla, especialmente en lo que concierne a la inspección técnica de las edificaciones.


El concejal del área, Domingo Malo, comentó que se están analizando ordenanzas similares vigentes en otras ciudades. Es el caso de Zaragoza, donde desde 2002 existe una normativa que regula desde el estado de los edificios hasta el tiempo máximo del que dispone un propietario para construir en un solar.


Los sucesos acaecidos en los primeros meses de este año en varios inmuebles de los cosos, con desalojos incluidos, conllevó el anuncio del entonces alcalde, Fernando Elboj, de la elaboración de un Plan de los Cosos como un conjunto de normas urbanísticas y medioambientales para frenar la degradación de esta vía, aunque Elboj, también responsable del área de Urbanismo, no concretó ninguna actuación.


Este plan dio sus primeros pasos hace 14 años, cuando el estudio de arquitectos Corvera-Hernanz realizó, entre 1996 y 1998, fichas de todas las propiedades y propuso una ordenanza para aunar criterios de actuación en las fachadas. Pero no se llegó a mas.


Desde entonces, el deterioro de la calle principal de Huesca, con casi un kilómetro de longitud, ha ido en aumento. Entre los ejemplos más sangrantes están los dos solares del Coso Bajo: el de Casa Vilas, derribada hace ocho años, y del Luces de Bohemia, vacío desde finales de 2008 y pasto de las hierbas y las ratas. A estos hay que añadir edificios como el de Nuevas Sederías, también en el Coso Bajo, donde el litigio entre la propiedad y el Ayuntamiento por la colaboración municipal en el coste de la rehabilitación (al ser un inmueble catalogado) no ha ayudado a su remodelación.


La degradación de muchos de los edificios, gran parte de ellos construidos a principios del siglo XX, ha coincidido con la crisis del mercad inmobiliario. Esta circunstancia ha supuesto que algunas licencias de obras concedidas para intervenir en los cosos hayan caducado, como la que se otorgó para la casa del Fumador (esquina con la calle de Goya). En este sentido, Luis Felipe ha afirmado que "un ayuntamiento no puede estar pendiente del mercado inmobiliario porque los solares, ya sean de particulares o de administraciones, tienen una función social en una ciudad".


Es lo que ocurre con la parcela donde estaba la antigua cárcel, en la avenida de Ramón y Cajal. El suelo es propiedad de la SIEP (Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios) y estaba destinado a la construcción de viviendas y locales municipales. La crisis ha dejado desiertas las dos subastas del solar y el ayuntamiento ha solicitado su cesión temporal para uso de los vecinos. En previsión de que la crisis se alargue el alcalde está incluso decido a modificar el convenio firmado con Interior en 2002.