La actuación de los bomberos, que duró más de cuatro horas, evitó que el incendio que se originó ayer en torno a las 12.00 en la escombrera de Almudévar, a las afueras del pueblo, pasara de un susto. Al cierre de esta edición, el fuego había arrasado unas dos hectáreas y los efectivos mantenían la zona controlada.

Las llamas se iniciaron en el vertedero por causas que se desconocen por el momento y, debido al viento que soplaba en la zona, una gran cantidad de papeles ardiendo llegaron a los campos más cercanos, por lo que el incendio se extendió hacia una granja de cerdos que se encuentra rodeada por un frondoso pinar, según informaron fuentes del parque de Almudévar.

El dispositivo de bomberos, fomado por 15 efectivos de la citada base, dos camiones y dos todoterrenos, cinco tractores, un camión de los forestales y un helicóptero cisterna, trabajó durante más de dos horas para controlar el incendio en su totalidad, algo que se convirtió en una tarea díficil y costosa debido a las fuertes rachas de viento que soplaron ayer en la zona afectada.

Los efectivos permanecieron toda la tarde remojando y vigilando el lugar para que no se reavivaran las llamas, aunque en ese tiempo tuvieron que intervenir una vez más al resurgir unos rescoldos. Una labor que realizaron sin problemas ya que el vehículo con los bomberos voluntarios se encontraba en las cercanías.

Desde el parque agradecieron la rápida colaboración ciudadana y también la de los colaboradores para lograr extinguir cuanto antes el fuego. Finalmente solo dos hectáreas fueron arrasadas, pero desde el cuerpo se hizo especial hincapié en lo costoso que había sido tener controlado el incendio.

Desde las 21.00 y hasta las primeras horas de la mañana de hoy, estaba previsto que los bomberos de la Comarca de la Hoya de Huesca tuvieran una presencia constante en las inmediaciones del lugar, con el objetivo de atajar cualquier posible rebrote.