La ola de calor alcanza hoy su pico máximo con más de 37 grados

Abanicos, ventiladores y aire acondicionado son el remedio estos días para los altoaragoneses que no han podido escapar de la ola de calor que afecta a toda la provincia. Sin ir más lejos, la temperatura más alta registrada ayer fue de 36,8 grados en Fraga, y superaron los 35 en Ballobar, Barbastro, Tamarite, Huesca y _Almudévar, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Y aunque algunos pensaran que el verano se había terminado a principios de agosto, cuando hubo que sacar las chaquetas más recias, la canícula ha vuelto con fuerza, y no parece que vaya a desaparecer hasta el fin de semana. La Aemet mantiene hoy la alerta amarilla por altas temperaturas, que podrían llegar a los 37 grados en la parte central y sur del Alto Aragón, como es el caso de Huesca y Sariñena. En el Pirineo también tendrán algún sofoco, sobre todo en Benasque y Canfranc, donde está previsto que alcancen los 36 grados. Mañana viernes continuará la prealerta y el termómetro se mantendrá en los mismos valores, mientras que el sábado y el domingo los mercurios darán un poco de tregua y bajarán a los 32 o 33 grados.

Un cambio en el consumo

Las altas temperturas vacían las calles de la capital oscense a primera hora de la tarde, y no se retoma la actividad hasta que amaina el temporal de calor. Y_los comercios notan el cambio de hábitos de los consumidores, tal y como explicó la secretaria de la Asociación de Comerciantes de Huesca, Vicen Mateo: “Por la mañana y a última hora de la tarde hay más actividad, pero en las horas centrales del día o estás en casa o en la piscina, no apetece ir a comprar”. Aunque Mateo añadió que “salir más tarde no implica que se venda menos”.

Sin embargo, a los hosteleros con establecimientos en el Pirineo les beneficia el mercurio alto. “A nosotros la ola de calor nos afecta para bien, porque la gente viene en busca de fresquito”, dijo Lorena Sánchez, de la Asociación de Empresarios del Valle de Tena, donde el fin de semana pasado se vio “más gente por la zona”, según Sánchez. Parecida situación están viviendo en la comarca del Sobrarbe. “Los turistas buscan una buena temperatura”, apuntó Mónica Valencia, de la Asociación Empresarial de Sobrarbe, quien destacó que “estos días el calor está siendo un poco insoportable, aunque por las noches se duerme bien”.

Por su parte, Jorge Llanas, de la Asociación Turística Valle de Benasque, opina que “las reservas han sido progresivas a lo largo del mes de agosto, porque se empezó mal y ahora los niveles son aceptables”, pero no cree que las altas temperaturas, que llegaron ayer a Benasque, hayan atraído a mucha más gente. “No veo una afluencia anormal para esta época”, argumentó.