Con los ecos del Festival del Vino todavía resonando, el Consejo Regulador de la denominación de origen altoaragonesa se embarca ya en los preparativos de la vendimia que, según sus previsiones, comenzará a finales de este mes y rondará los 17 millones de kilos de uva, una cantidad similar a la que entró en las bodegas en la pasada cosecha.

Las condiciones climatológicas de la primavera y el verano han sido "benévolas" por lo que la cosecha "pinta muy bien", asegura Mariano Beroz, presidente de la D. O. Somontano. La uva ha crecido sana pero queda ahora esperar que las temperaturas no sean muy elevadas en los días que restan de agosto. "Si no hay excesivo calor de forma continuada, tendremos una muy buena cosecha tanto en cantidad como en calidad. No sería bueno que hiciera excesivo calor hasta la época de la vendimia porque eso hace que la uva madure un poquito antes de la cuenta y los vinos no sean tan buenos. Pero las previsiones son ahora muy buenas", afirma Beroz.

Fijar una fecha de inicio de la vendimia siempre es complicado ya que depende en buena parte de la meteorología. Pero todo indica que la recolección de la uva en los viñedos del Somontano arrancará en la última semana de agosto. Solo si el calor apretara se podría adelantar unos días.

Posiblemente la producción de uva sea superior a los 17 millones de kilos estimados por la D.O. que el año pasado entraron en las bodegas, por lo que alguna parte de la cosecha se quedará en el viñedo sin recolectar por criterios de capacidad o de necesidades comerciales ya que las empresas no puedan asumir tanto volumen.

Para el presidente de la D.O. Somontano, lo ideal sería "consolidar esta base de unos 17 millones de kilos para en unos años ir creciendo un poquito". "Con la que está cayendo no sería un objetivo malo", subraya.

Las 34 bodegas que conforman la D.O. Somontano saldrán al viñedo durante finales de agosto y aproximadamente por periodo de un mes, tiempo estimado que durará la vendimia. Durante ese mes, las máquinas convivirán con el vendimiado a mano que realizan algunas de las principales bodegas de la D. O. como Enate o Viñas del Vero, pero también otras más modestas y de ámbito familiar como Obergo, Alodia, o El Grillo y la Luna, bodega que junto a De Beroz han sido las dos últimas en incorporarse a la marca Somontano. En total un millar de personas estarán empleadas de forma directa o indirecta en las labores de vendimia.

El presidente de la D.O. Somontano valora el hecho de que cada vez haya más bodegas en esta joven denominación que recientemente acaba de cumplir los 25 años. Curiosamente la última incorporación ha sido su empresa. "Cada vez somos más bodegas intentando vender vino y abriendo nuevos mercados y por otro lado explorando mercados de exportación de cara al futuro", señala el presidente y bodeguero.

Sobre la exportación de los vinos, un camino abierto hace algunos años, Beroz deja claro que todos los esfuerzos que hacen tanto las bodegas como la D.O. para captar el mercado internacional "tienen rentabilidad a medio o largo plazo pero hay que hacerlos".

Difícil competencia en España

La tendencia del consumo nacional de vino es centrípeta, es decir, que los consumidores de las comunidades autónomas de España tienden a comprar el vino elaborado en su propia región. "Somontano es una marca muy reconocida a nivel nacional y tiene una pequeña presencia en toda España pero no va a conseguir nunca conseguir un trozo de pastel de esas comunidades que también son productoras de vinos y que cada vez más van a potenciar los productos elaborados en su propia tierra", reconoce.

La comercialización de botellas de vino Somontano en el exterior oscila entre un 20 y un 25%. Este año en las ventas globales de la D.O. han experimentado un optimista aumento de entre el 5 y 10% con respecto al primer semestre del año pasado.