RIBAGORZA

La representación de 'Lo Consell' de Laspaúles cosecha un nuevo éxito

Unas mil personas presenciaron la recreación histórica, con una nueva escena.

Un momento de la nueva escena que se ha introducido este año en el montaje.
La representación de 'Lo Consell' de Laspaúles cosecha un nuevo éxito
ÁNGEL GAYúBAR

Tras un año de ausencia ya que se decidió en 2008 que la obra tuviera carácter bienal, los vecinos de Laspaúles se volcaron de nuevo ayer con la representación de 'Lo Consell de Laspaúls', una obra que narra en clave dramática lo ocurrido en esta localidad en 1593.

Durante toda la jornada, cientos de personas -más de mil según la organización- se dieron cita en este pueblo atraídas tanto por la representación como por la celebración de un muy concurrido mercado artesanal paralelo que estuvo abierto desde las 10.00 y que fue un complemento perfecto para el espectáculo teatralizado. Entre los asistentes estaba el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, que se encuentra estos días descansando en la cercana localidad de Bonansa, su pueblo natal que estos días celebra sus fiestas patronales.

La obra narra unos hechos históricos que están recogidos en los manuscritos de la villa. El momento clave de esta narración histórica es el que aborda los sucesos acaecidos entre el 19 de febrero y el 29 de abril de 1593, cuando fueron procesadas 28 mujeres acusadas de brujería, 21 de las cuales eran de Laspaúles y siete de los pueblos vecinos. Finalmente 22 resultaron ajusticiadas en lo que debió ser un momento de histeria colectiva entre los habitantes de un municipio que por entonces rondaba los 250 habitantes.

Directa o indirectamente, en la representación participan la mayor parte de los habitantes de Laspaúles. Más de ochenta vecinos actúan como personajes de la trama o como figurantes y son otros muchos los que realizan los trabajos imprescindibles de sonorización, montaje de escenarios, tramoyistas, vestuario o labores de intendencia. Unos trabajos que han estado preparando desde hace varias semanas y que permitieron que el espectáculo discurriera de manera ágil y dinámica aunque se prolongó un tanto sobre el horario previsto.

Una vez más, el comienzo de la representación estuvo marcado por el sonido de los clarines que recibieron en la plaza Mayor a don Martín, el conde de Ribagorza, en su visita al pueblo para tomar posesión de su mayorazgo y presidir Lo Consell, el consejo con los ricos hombres de la localidad que le dan una solemne bienvenida. Entre los temas a tratar por el conde y sus consejeros está el del juicio a un grupo de mujeres acusadas de brujería.

Fue en este momento en el que se introdujo la principal novedad sobre el montaje de años anteriores; la inclusión de una escena que preludia la tragedia que acompaña la visita. Las mujeres recelan de la llegada del conde y muestran su temor de que la presencia condal pueda desencadenar la tragedia. En un clima de temor evidente, hablan de esconderse unos días en los montes próximos anticipando el trágico final de la historia.

Pero, históricamente, Lo Consell no se centraba solo en la impartición de justicia ya que su misión era la de regular las relaciones entre los ciudadanos, determinar leyes para el uso racional de prados y pastos y promocionar y administrar los servicios públicos de carnicería, taberna, estanco de aguardiente, molino, montaña y vecinales, y estas actividades quedan reflejadas en diferentes cuadros del espectáculo que ofrecen al espectador una idea general sobre los hábitos de la vida cotidiana en las postrimerías del siglo XVI. No obstante, la tensión dramática estalló una vez más en la tarde de ayer con el juicio, la condena y la posterior ejecución de las supuestas brujas que subieron al cadalso en el momento cumbre de la representación.