La mejor noticia del amistoso en Sabiñánigo no es, desde luego, una sorpresa. Que Roberto vaya afinando la puntería con el paso de los entrenamientos y los amistosos supone un aval de éxito para el proyecto de Onésimo Sánchez. En Grañén cazó uno y ayer, dos goles. Ambos de cabeza, para abrir el tercer triunfo de la pretemporada. Y ya es pichichi. Ante el rival de mayor entidad en lo que va de verano, los azulgrana volvieron a mostrarse en fase de rodaje. Jokin cerró en la segunda parte una victoria que ha de sumar en positivo en la libreta del pucelano.

No hubo un fútbol para volverse locos, pero quién lo ofrece en este tramo de la preparación. La exigencia hace que las botas pesen unos cuantos kilos más, y el terreno de juego del Joaquín Ascaso, de dimensiones más reducidas que las del Alcoraz y con césped artificial, tal vez no facilitó las cosas. No, al menos, lo que Onésimo pregona. El primer tanto llegó con un balón colgado y los dos siguientes, tras saques de esquina. Costó abrir el campo y dejar que el fútbol fluyese frente a un ‘Sabi’, por otra parte, sacrificado y con notables facultades en defensa. Así hay que comportarse ante un enemigo que es mejor, y además dispuso de una bala en cada tiempo.

El 0-1 llegó al minuto y 40 segundos. Bauzá prolongó a Camacho y este la puso por la izquierda a la cabeza del madrileño, que mandó la bola a la derecha de Lacasa. Apenas había dado tiempo a registrar la disposición táctica del Huesca. Como apuntes reseñables, un 4-4-2 con Molinero en el lateral derecho y Robert en el izquierdo. Como pivotes, Bauzá y Sorribas, que sustituía al tocado Sastre. El balear se quedó fuera, como Galán. Abiertos en banda, Gallardo y Camacho, y arriba Valentino y Torreta.

Con este plan, Roberto es quien se mantiene en una posición más estática, pero con trabajo, y los hombres más adelantados intercambian sus posiciones. Camacho gozó de más libertad, y botó el córner del 0-2. Otra vez, Roberto con la testa. Valentino también tuvo un par y el Sabiñánigo se estiró al final, con un gran remate de Gonzalo que salvó Andrés.

En la segunda parte solo sobrevivieron Corona y Bauzá, a quienes relevarían Camacho y Sorribas. El plan fue similar, con Vega como hombre más adelantado, Víctor detrás y Jokin y Gilvan en las alas. El navarro se apuntó el 0-3 y, con los cambios reseñados, Víctor acompañó a Sorri, Helguera retornó a la zaga y Cabrero salvó una doble ocasión, la segunda muy clara para Imanol. Mañana espera la SD Logroñés y el sábado, el Montesusín.