MUNICIPAL

Felipe y Cosculluela abogan por el trabajo en común y la colaboración institucional

El nuevo alcalde de Huesca y el presidente de la Diputación Provincial celebraron ayer su primera reunión oficial.

Antonio Cosculluela (I) y Luis Felipe durante la reunión de ayer.
Felipe y Cosculluela abogan por el trabajo en común y la colaboración institucional
R. G.

El presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Antonio Cosculluela, y el alcalde oscense, Luis Felipe, abogaron ayer por el "trabajo en común" y por una "intensa colaboración" entre ambas instituciones, durante su primera reunión oficial tras el pleno de investidura del nuevo alcalde de Huesca.

El "buen entendimiento institucional y también personal" que ambos mantienen "ayudará a la consecución de los objetivos marcados con los ciudadanos y a sacar adelante los proyectos de la ciudad y de la provincia", señalaron Felipe y Coscullela.

Durante la reunión, el presidente de la Diputación se puso a disposición del alcalde oscense para prestarle el apoyo necesario en los proyectos y reivindicaciones del ayuntamiento de la capital del Alto Aragón. En este sentido, Cosculluela recordó lo que ha podido realizarse en la ciudad en los últimos años gracias a la unión de esfuerzos y recursos.

El presidente de la DPH se refirió a la transformación de la zona universitaria, a la dotación de nuevos equipamientos en barrios de la periferia como el Perpetuo Socorro, al apoyo a los principales clubes deportivos de la provincia y a otros acuerdos de colaboración estratégicos en el ámbito turístico, cultural y social".

El alcalde también incidió en la "excelente relación" que desde siempre han mantenido el Ayuntamiento de la capital y la Diputación Provincial. Felipe destacó que en estos momentos de crisis

lobal, ambas instituciones deben ponerse de acuerdo en las prioridades porque "hay que ajustar el gasto para que las líneas que afectan al desarrollo se mantengan lo mejor posible". El primer edil también transmitió a Cosculluela su preocupación por la situación a la que pueden verse abocados algunos de los 200 trabajadores de la empresa Luna, que ha presentado un expediente de cierre.