"Hoy es un día importante para acabar con el último reducto de la dejadez en los polígonos industriales de Huesca". Así valoró ayer el presidente de la Federación de Polígonos de Huesca, Ignacio Almudévar, el convenio de financiación firmado por el Ayuntamiento y el departamento de Industria para actuar en las calles de Ballobar, Badajoz y Alcampell, en la zona industrial de Martínez de Velasco. El proyecto consiste en la reparación y reposición de infraestructuras y cuenta con un presupuesto de 398.000 euros.

El consejero de Industria, Arturo Aliaga, y el concejal de Desarrollo, Fernando Lafuente, rubricaron un convenio por el que la administración autonómica aporta 150.000 euros. La mayor parte irá a parar a estas obras, pero también servirá para pagar las catas arqueológicas realizadas en la plaza de San Antonio para el estudio del aparcamiento subterráneo.

Martínez de Velasco es el más antiguo de los cuatro polígonos de Huesca. Cuenta con 111 empresas, la mayoría pymes, ubicadas a ambos lados de la avenida. Hace seis años ya se llevaron a cabo obras de pavimentación y de sustitución de los parterres. Las zonas ajardinadas se reconvirtieron en aparcamientos ya que nunca se usaron como tal y únicamente acumulaban suciedad. Pero como hubo que repartir la inversión con los otros tres polígonos, quedaron tareas pendientes.

Ahora llega la tercera y última fase de las actuaciones en Martínez de Velasco, a ejecutar este mismo año. Afecta a parte de las calles de Badajoz y Ballobar, otra vía situada entre ambas y el final de la de Alcampell. Consistirá en la reurbanización de las calles y en la sustitución del colector de aguas residuales de la calle de Badajoz, la parte más costosa.

Los empresarios de Martínez de Velasco han acogido con satisfacción estas obras, que "rematan" el proyecto de mejora de la zona industrial más urbana de Huesca, en palabras del presidente de la Asociación de Usuarios, Félix Orduna, quien destacó la "diferencia abismal" que se observa entre el polígono antes y ahora. Recordó que es obligación de un ayuntamiento mejorar las condiciones de trabajo del sector productivo.

El concejal Fernando Lafuente anunció además la adjudicación de la mejora de la calle de División 52, por un importe de 179.000 euros, a la empresa Vialex Roldán, y recordó que con cargo al Plan E de 2010 hay una partida de 649.000 euros para la construcción de un Centro de Recursos Tecnológicos e Industriales en el Sepes. Añadió que se está estudiando una fórmula de colaboración con los empresarios de los polígonos para el mantenimiento de las obras, posiblemente a través de un ente mixto.

Lista de reivindicaciones

El presidente de la Federación de Polígonos Industriales de Huesca agradeció las inversiones, pero pidió al alcalde un esfuerzo para "desbloquear el convenio de la travesía de la N-240, que se ha venido abajo este año", de manera que se dignifique la entrada a la ciudad desde la carretera de Barbastro, desde donde también se accede al polígono Sepes.

Otra de sus reivindicaciones es la regulación de la actividad en las zonas industriales. "Hemos adecentado los polígonos, pero necesitamos unas ordenanzas para regular el tráfico, los aparcamientos...". En el cumplimiento de la futura ordenanza deberán colaborar los empresarios, precisó el concejal de Desarrollo, para evitar, por ejemplo, que en algunas parcelas "se amontonen los trastos viejos".

La lista de peticiones de Ignacio Almudévar no acabó aquí y solicitó que se ponga nombre a las calles que todavía no lo tienen, ya que a veces es difícil guiar a un transportista que debe llevar una carga a una nave. Más grave puede ser cuando se trata de dar aviso a un servicio de emergencia.