CAPTADO POR UNA CÁMARA

El oso vuelve a atacar un rebaño en el monte de Ansó y mata otra oveja

Una cámara instalada por los guardas ha fotografiado al animal y se descarta que el autor de este y el anterior asalto sea el viejo Camille. Es el tercer ataque al ganado del Alto Aragón en los últimos 10 días.

Hay dos vecinos de Ansó que no ganan para sustos. El oso volvió a atacar ayer su rebaño, el mismo que ya había asaltado la madrugada del pasado sábado. En esta ocasión mató una oveja. El Gobierno aragonés confirmó ayer la muerte de esta res y que el autor no es el viejo Camille, uno de los pocos plantígrados autóctonos que quedan en el Pirineo. Con esta ya son tres las embestidas que estos animales, que tantos conflictos generan entre ganaderos y ecologistas, han protagonizado en los últimos diez días.

El ataque al rebaño se produjo durante la madrugada de ayer en el paraje ansotano conocido como Idoya, muy cerca del límite entre Ansó y Navarra.

Fue uno de los pastores quien encontró la oveja muerta. El rebaño, formado por reses de Lourdes Susín -propietaria de los dos animales que se comió el sábado- y de José Mendiara se había disperso. La señal para el ganadero fue clara, ya que era lo mismo que había ocurrido el fin de semana. Enseguida localizó el animal muerto, despellejado y medio comido, sobre todo las zonas más grasas, por el oso. No dudó un momento y llamó a los agentes que siguen los pasos del oso, que se personaron en el lugar para constatar que se trataba de un ataque del plantígrado.

Y aunque el lugar en el que se ha producido el ataque es una zona que suele transitar el oso Camille, Medio Ambiente del Gobierno aragonés ha descartado que se trate de él. Según confirmaron fuentes del departamento, los guardas que siguen la pista de los plantígrados por todo el Pirineo lograron captar una imagen con una de las cámaras fotovoltaicas que tienen instaladas por el monte.

En dicha fotografía se aprecia perfectamente, confirmaron dichas fuentes, que los cuartos traseros del animal no están pelados por lo que se descarta que sea el oso autóctono. Cabe recordar que Camille, debido a un problema de dermatitis que según los expertos le provoca la falta de una hembra con la que aparearse no tiene pelo en dicha zona. De este viejo animal, que calculan pasa de los 25 años, no se tiene noticias desde que despertó de la hibernación en el mes de febrero.

Medio Ambiente todavía no ha determinado qué animal fue el protagonista de los dos últimos ataques en Ansó. Pero en esta parte occidental de los Pirineos viven otros tres osos, todos ellos machos. Son Neré, del que recientemente se localizaron huellas en montes de Ansó y Hecho, Aspe-Ouest y Canelito, el osezno de la última osa que habitaba esta zona, Canelle, y que fue abatida por un cazador francés en 2004.

Con este último ataque de oso en Ansó ya son tres los contabilizados en el Pirineo aragonés en los últimos diez días. En el mismo rebaño que ayer, un plantígrado se comió dos ovejas de raza ansotana el pasado sábado. Además, la madrugada del lunes 14, otro animal, este de reintroducción, mató a otra oveja en los montes de Gabás, en el municipio ribagorzano de Bisaurri.