SUCESOS

Un joven ecuatoriano muere electrocutado al podar un árbol en un campamento de Villanúa

Una rama tocó un cable de alta tensión y provocó una descarga sobre la víctima. Guardia Civil y DGA investigan el suceso y si el operario tenía contrato de trabajo.

Un coche fúnebre acudió al campamento para trasladar el cadáver.
Un joven ecuatoriano muere electrocutado al podar un árbol en un campamento de Villanúa
L. Z.

Un joven de 33 años y de nacionalidad ecuatoriana, J. N. M. Q., falleció ayer electrocutado mientras podaba un árbol junto a un tendido eléctrico en el campamento Cheso de Villanúa, gestionado por el Patronato de Nuestra Señora de los Dolores de Zaragoza. La Guardia Civil y el Instituto de Seguridad y Salud Laboral (ISLA) investigan ahora las causas del accidente laboral.

El suceso se produjo sobre las 10.40. Según fuentes del Servicio de Emergencia del Ayuntamiento de Jaca, el 112 recibió una llamada de socorro del campamento, ubicado a solo un kilómetro del casco urbano de Villanúa, alertando de que había un operario que había sufrido una descarga eléctrica mientras podaba las ramas de un chopo y que estaba atrapado en lo alto del árbol.

En esos momentos, en el campamento únicamente se encontraban 6 miembros del personal de mantenimiento que, al parecer, estaban preparando las instalaciones de cara a la apertura el 21 de junio de un 'campus de inglés'.

Al lugar acudió de inmediato la Guardia Civil de Canfranc, una ambulancia del 061 y cuatro componentes del Servicio de Emergencias del Ayuntamiento de Jaca con un camión de excarcelación y material de escalada. Sin embargo, cuando llegaron los bomberos y los sanitarios, nada se pudo hacer ya por salvar la vida del operario. Hasta el campamento también se acercó personal de Endesa por si hubiera hecho falta cortar el suministro eléctrico, pero al final no fue necesario.

A la espera de lo que concluya la investigación de la Policía Judicial de la Guardia Civil y del ISLA, las primeras hipótesis apuntan a que el hombre estaba subido a un chopo a unos 12 metros de altura realizando labores de poda sin ningún tipo de medidas de seguridad. Mientras, en la parte de abajo del árbol, otro compañero estaba sujetando con una cuerda las ramas que cortaba la víctima.

Una línea de 132.000 voltios

Precisamente, una de estas ramas, al caer, chocó con un cable de alta tensión de 132.000 voltios que estaba a pocos metros y desafortunadamente actuó como conductora de la corriente eléctrica, alcanzando al operario. Su compañero de faena no sufrió daños.

Responsables del Patronato Nuestra Señora de los Dolores de Zaragoza llegaron poco después pero no quisieron hacer ninguna declaración. Tan solo dijeron: "No sabemos lo que ha pasado".

Mientras, la DGA informó de que la Inspección de Trabajo tenía ayer "dudas" de que el suceso pudiera calificarse como accidente laboral ya que no habían podido determinar aún si la víctima tenía o no contrato para estas labores.

Luis Terrén, alcalde de Villanúa, acudió a las instalaciones nada más producirse el suceso. "Ha sido algo tan triste como dramático. Parece que el hombre estaba podando las ramas de un chopo de 20 metros de altura, precisamente para evitar que un cable pudiera tocar el árbol y producir alguna chispa", explicó.

"No sé si tenía o no contrato"

Terrén confirmó que en las épocas de verano acuden al campamento desde Zaragoza algunas personas para ayudar en tareas de mantenimiento. "De hecho, la persona fallecida no vivía en la zona. Creo que son personas que colaboran con el patronato en la capital aragonesa y suben aquí a echar a una mano. Lo que no sé es si tenía o no contrato", afirmó.

El alcalde de Villanúa, que conoce a los rectores del patronato por su larga relación con la localidad, aseguró que son un grupo que ha ayudado "bastante" al pueblo. "Llevan cerca de 25 años en Villanúa con los campamentos, y desde hace un tiempo habían mejorado las instalaciones", comentó. "Cuando ha habido que arreglar alguna ermita o crear campos de trabajo, ahí siempre ha estado el patronato", insistió.