REPORTAJE

La oportunidad de los humildes

Altorricón, localidad de 1.500 habitantes, ha logrado el ascenso a Tercera División y recoge la herencia de otros conjuntos modestos de la provincia.

Imagen correspondiente al partido Huesca-La Fueva disputado en la temporada 2003/04.
La oportunidad de los humildes
JAVIER BLASCO

Frente a los pesos pesados del fútbol regional aparecen, muy de vez en cuando, humildes aspirantes a hacerse con un pequeño hueco en Tercera. El último ejemplo es el del Club Deportivo Altorricón. Una localidad de 1.500 habitantes con una masa social de alrededor de 200 socios que ha empujado a los verdiblancos a lo más alto quince años después de refundarse sobre las cenizas del club original y nueve de su primera experiencia junto a clubes de la talla de Teruel, Barbastro, Fraga o Casetas.

Su paso por Tercera fue breve, de solo un curso, en la tónica de otras localidades que han disfrutado de los aromas de esta liga, que no suele perdonar los presupuestos más modestos. El Altorricón tiene varios espejos en los que mirarse. Desde que la categoría se desligó de los conjuntos de otras comunidades autónomas, en el ejercicio 1987/88, once equipos de sustrato humilde han jugado de tú a tú a los Huesca, Binéfar, Zaragoza B, Ejea y compañía.

Se trata de Altorricón, San Lorenzo del Flumen, Lalueza, La Fueva (ubicado en la localidad de Tierrantona), Alcampell, Peralta de Alcofea, Tamarite de Litera, Alcolea de Cinca, Almudévar, Biescas y Estadilla. Entre todas estas poblaciones suman alrededor de 14.000 habitantes, poco más o menos que la que presenta Jaca, cuyo Jacetano ha perdido la categoría este mismo año. Pelea desigual que, en la mayor parte de los casos, fue demasiado breve.

El Altorricón supone la actual alegría del fútbol altoaragonés, que de esta manera volverá a contar con seis clubes, con el Pomar pendiente de lo que haga La Muela en su play off para ganarse una séptima plaza. Su precedente, el San Lorenzo. La aventura de los monegrinos se extendió por dos ejercicios, entre 2007 y 2009. Si se bucea en los orígenes, hay que referirse al Estadilla, que estrenó el nuevo formato 'repescado' tras su descenso en la 86/87. Tamarite y Almudévar surgirían poco después. El siguiente modesto en aparecer fue el Peralta, ascendido en la 88/89 y superviviente hasta 1992. En 1990 se produciría otro descenso, el del Tamarite, mientras que subió el Biescas. La aventura de estos sería efímera, pues regresó a Preferente junto al Almudévar en la 90/91, a la vez que se ganaba un lugar en Tercera el Alcolea. Otro conjunto que aguantó un año.

En la 93/94 se registró el primer ascenso del Lalueza. En los años posteriores se volverían a subir a este carrusel Tamarite y Peralta e irrumpiría el Alcampell en la temporada 2000/01 para perder el sitio nueve meses después, a la vez que Altorricón y Lalueza en un curso particularmente negro. La Fueva irrumpió en la campaña 2003/04, en la que se clasificó en la 15ª plaza para ser el colista en la siguiente. Este equipo, ahora en Primera Regional, representa a los 127 habitantes de Tierrantona y a los 625 de este valle.

Sobre el césped, resultados ahora improbables como ese 1-0 del Lalueza al Huesca un 7 de mayo de 2000. Marcó Gaudioso. En los banquillos, nombres como los de Antonio Díaz, ligado en su carrera a La Fueva, Lalueza o Almudévar, Ángel Royo en el San Lorenzo, Pedro Polo en el Peralta o, ahora, Félix Jiménez en el Altorricón se merecen más que un pie de página en el libro de la Tercera.