SD HUESCA

En descenso

El Huesca concluye la jornada en el 20º puesto, pero sigue dependiendo de sí mismo.

Los jugadores titulares ante el Villarreal B, ayer durante el entrenamiento en el Instituto Montearagón. Con ellos, Agustín Lasaosa y Jesús Paredes.
En descenso
RAFAEL GOBANTES

Con las dos últimas jornadas por delante, el Huesca sigue dependiendo de sí mismo para mantenerse otro año más en Segunda División. Eso, a pesar de que, ayer, el triunfo del Real Unión sobre el Levante (2-1) desplazase a los azulgrana a la antepenúltima posición. En descenso, igualados a 46 puntos con tres equipos más -Albacete, Real Unión y Murcia- y por primera vez desde la jornada 14. Más allá de la rémora psicológica que pudiera causar esta marcha atrás, los oscenses saben que no deben mirar a nadie más que a sí mismos para salvarse. Que con dos victorias ante Cádiz y Celta se quedan. Incluso con cuatro puntos resultaría suficiente, los que faltan para rebasar la barrera de los 50.

El Huesca es uno de los más perjudicados en ese cuádruple empate, puesto que le hace retroceder a favor de Albacete y Real Unión debido a la norma de los puntos conseguidos en los duelos directos. Los de Antonio Calderón lograron nueve (dos victorias, tres empates y una derrota) por diez de manchegos y vascos y cuatro de los murcianos. De cara a este final de liga, todo podría decidirse por pequeños detalles, pero resulta capital la victoria sobre el Cádiz el próximo fin de semana en El Alcoraz con jornada unificada. La Liga de Fútbol Profesional definirá hoy día y horarios.

No hay apenas margen para la especulación. El axioma es sencillo. La victoria dejaría la permanencia al alcance de la mano y el empate o la derrota ubicarían a los altoaragoneses con un pie en Segunda B. De hecho, aunque se debería producir una improbable carambola de resultados, el equipo azulgrana podría bajar ante los andaluces siempre que pierda ese duelo. Nueve equipos, sin contar al descendido Castellón, se juegan el pan y la sal en los últimos 180 minutos de la temporada; como dijo Calderón el sábado, raro sería que el Huesca no se encontrara entre ellos. Normalidad dentro del desasosiego.

Córdoba, Las Palmas, Salamanca y Nástic también están invitados a la 'fiesta', pero ahora mismo lo que más preocupa son el Cádiz y lo que llega por detrás. Tres puntos separan a nueve conjuntos. Además, hay algunos duelos directos: Córdoba-Real Unión y Murcia-Las Palmas, a los que acompañan los Albacete-Girona, Salamanca-Betis y Nástic-Elche. Se avecina una tarde de transistores y móviles. En realidad, nadie depende de nadie y todos miran a todos. Y en la última jornada, también unificada y en la que los azulgrana visitan Balaídos, unos reirán y otros llorarán. Para que el equipo de Calderón haga lo primero, ha de ganar al Cádiz y esperar las derrotas de sus rivales más enconados. Con independencia de lo que sucediera en otros estadios, el empate ante un Celta ya salvado de antemano sería suficiente.

El Rayo, que ayer alcanzó los 50 puntos, es la referencia más válida en estos momentos. Esos guarismos le otorgan la tranquilidad casi plena; un Huesca con 49 puntos adelantaría, con probabilidad, a algunos conjuntos y reduciría al mínimo sus opciones de pasar más problemas. El empate, desde luego, no solucionaría nada. Es más, obligaría a ganar en Vigo y ceñirse a los 'golaverages'. En este momento, lo tiene ganado a Albacete, Murcia y Salamanca, perdido con Real Unión, Rayo y Córdoba y empatado con Nástic y Las Palmas. En la primera vuelta se sacó un 0-0 del Ramón de Carranza.

Si se estudian los triples empates, el Huesca supera a Albacete y Murcia, pero no es el caso si suma los mismos puntos que Real Unión y Murcia por un lado (ganan los vascos) y Albacete y Real Unión por otro y Real Unión y Murcia por el último. Aquí, se imponen los irundarras y los oscenses son segundos. Luego, habría que incluir en las cábalas al Cádiz y a otros. Un caos matemático que solo se resuelve a golpe de goles. La derrota con los amarillos abriría un panorama muy negro, con la urgencia de ganar al Celta y esperar tropiezos para no descender este mismo fin de semana.

Desde luego, un pleno de dos victorias evitaría males mayores, por muy mal que se vea ahora la situación de un equipo que había gozado de rentas de hasta siete puntos sobre el descenso. El Cádiz tiene la llave. Mientras, la plantilla descansa hasta mañana por la tarde y la entidad presentará hoy sus iniciativas para que El Alcoraz presente un lleno a rebosar en una cita crucial para el futuro de los azulgrana.