FÚTBOL

Choque de urgencias

De izquierda a derecha, Paco Gallardo, Paco Borrego, Sorribas, Dorado e Iriome, durante el entrenamiento de ayer.
Choque de urgencias
RAFAEL GOBANTES

Antes de nada, es de ley una reverencia al invitado. El Betis es el club de 30.000 socios y casi 400 peñas en todo el mundo, "manque pierda". Cardeñosa, Curro Romero, el sombrero cordobés que antes se ajustaba Finidi y ahora Emana. Don "Manué" y su egolatría. Una liga y dos Copas, la última en 2005 y con Toni Doblas de portero? Historia del fútbol español sobre el césped del Alcoraz, como antes el Zaragoza, la Real Sociedad o el Celta. Dos planetas muy lejanos cuyas órbitas se encuentran a partir de las 20.00 (Aragón TV). El fútbol es democracia y mide de tú a tú a Huesca y Betis. Uno por la permanencia; el otro, por la devolución a Primera.

Con el debido respeto, los azulgrana se quieren sentir favoritos en una fiesta que puede devenir en desgracia para quien salga derrotado. El triunfo del pasado sábado en Castellón aflojó un tanto las tensiones. De no mediar la parada del mentado Doblas en el descuento de Castalia, los oscenses afrontarían los cuatro últimos partidos en puestos de descenso. Pero siguen dependiendo de sí mismos; al margen de cálculos y mediciones, el Huesca puede cerrar esta jornada con 48 puntos y un paisaje mucho más hermoso para los sentidos. Vencer, o como mínimo empatar, supone la forma más eficaz de olvidarse de lo que suceda en otros estadios. También, de buscar la cuadratura del círculo cuando se huela algún apaño ajeno. Mirar de reojo a Real Unión, Salamanca o Cádiz será inevitable. Suceda lo que suceda.

Los altoaragoneses se han referido en los últimos días a la dificultad de la empresa y al mérito de sumar ante un plantel que es Primera, se mire por donde se mire. Es esta, también, una manera de traspasar responsabilidades al conjunto andaluz, que sabe que un pleno de doce puntos supone el pasaporte a la Liga de las Estrellas. Lo conoce perfectamente su técnico, el aragonés Víctor Fernández, quien ha hallado en el Betis una nueva oportunidad para reengancharse al fútbol de primer nivel. Regresa a su tierra con una misión apremiante. Antonio Calderón rebusca en su libreta para hacerse con la manera de convocar el hechizo del Alcoraz, perdido en las derrotas consecutivas ante Recreativo, Cartagena y Real Unión. La cuarta torcería el timón hacia la permanencia al margen de cuál pudiese ser la reacción de los aficionados. Es momento para la unidad.

Y el míster no podrá contar con dos de sus escudos, Corona y Luis Helguera, sancionados por el Comité de Competición. Como se sabe, son dos de los tipos que juegan siempre que pueden, pero el modo de reparar tales daños ya es conocido. Lo más probable es que Paco Borrego acompañe a Dorado en el centro de la defensa y que Camacho retrase su posición al pivote, lo que posibilitaría la entrada de Vegar en la media punta. Arriba, el tanque Moisés, bendecido después de marcar ante Real Unión y Castellón. El veterano delantero representa el 'factor' sevillista, como Corona o Gallardo.

En el extremo opuesto, un Doblas para quien es su día especial. Aunque es más del Betis que Lopera, que nadie dude de que durante 90 minutos se convertirá en el detractor número uno. Sus principales enemigos, Pavone y Jonathan Pereira. Son días para primar la eficacia sobre la estética, pero valga el precedente de la primera vuelta (1-1), cuando Camacho implantó justicia sobre el Ruiz de Lopera en el último aliento. El Huesca se crece con los mejores, como bien saben la Real o el Hércules; también es consciente de que es capaz de lo mejor y lo peor en el mismo partido, véase el Real Unión. Manejar virtudes y limitaciones supone el punto de partida para detener a este hambriento Betis.