SOMONTANO

El Coso de Barbastro se convertirá tras su reforma en un paseo semipeatonal

El paseo del Coso de Barbastro será objeto de una profunda reurbanización para convertirlo en un espacio semipeatonal en el que convivan los vehículos y los ciudadanos, sin olvidar, el estacionamiento y los servicios de carga y descarga. Las obras, que tendrán un coste de 1.200.000 euros, se iniciarán a comienzos de octubre y se espera que concluyan antes de la Semana Santa de 2011.


El proyecto pretende revitalizar este espacio, y, por extensión, la actividad comercial y urbana de su entorno, mejorando la accesibilidad para los peatones y dándoles prioridad sobre los vehículos. Para ello, se mantendrá la estructura actual de la zona, con su tradicional paseo y arbolado central, pero se modificará el pavimentado, el mobiliario urbano y se utilizará un innovador sistema para la refrigeración por nebulización de agua (para rebajar las elevadas temperaturas del verano con 585 pulverizadores) y modernos servicios urbióticos (un sistema de sensores para dotar al entorno urbano de funciones avanzadas con el objetivo de optimizar y mejorar la gestión del la ciudad).


El paseo del Coso tiene más de cien años, a lo largo de los cuales ha sufrido un importante deterioro, a pesar de que se ha mejorado en diversas ocasiones realizando pequeñas actuaciones.


El ámbito de actuación comprende la totalidad de esta vía y sus entronques con la plaza de Aragón y la calle de San José de Calasanz a la altura del acceso principal a la catedral, y con las calles Academia Cerbuna, San Ramón y General Ricardos. En total son 5.096 metros cuadrados.


La banda central del paseo mantendrá su nivel de altura y su anchura, 9 metros, con dos bandas de servicio laterales de 1,50 metros cada una, en las que se alinean las farolas, el mobiliario urbano y los alcorques con su arbolado, ya que se mantienen todos los árboles. Estará limitado en ambos lados por dos rampas frontales de acceso y, en sus extremos, por dos bandas laterales exteriores de 1,05 metros con tres escalones y por una rampa.


En el lateral izquierdo (números pares) la acera será una plataforma única con acceso, de forma puntual, a los vehículos de emergencias, servicios urbanos, mudanzas y carga y descarga.


En el lateral derecho se construirá una plataforma única manteniendo un carril paralelo al paseo para el paso de vehículos con límite de velocidad a 30 km/h y reduciendo la anchura de la calzada a 3,25 metros. Se ampliará la acera de forma que, en su lado más estrecho, tenga 2,25 metros y, en el más ancho, casi 5. El acceso al paseo central se realizará por tres pasos de peatones que comunicarán con las dos rampas y la escalera de tres peldaños.


Este lateral, por el que circularán los vehículos como hasta ahora, contará con doce plazas de aparcamiento lineal, cuatro de carga y descarga y ocho de rotación. Tanto la acera como las entradas a los garajes dispondrán de bolardos extraíbles que permiten la peatonalización total en momentos puntuales.


En el entronque de la avenida de Navarra con la calle de San José de Calasanz hasta el acceso a la catedral y de las calles Academia Cerbuna y San Ramón, se creará una plataforma única en cada zona con prioridad peatonal que se unirá con el paso central del paseo mediante la rampa frontal.


El pavimento será a base de piedras de diferentes tamaños. Se colocarán luminarias en fachadas y columnas de acero. El mobiliario urbano consistirá en bancos, papeleras, aparcabicis y barandilla.