La provincia acumula 20 ERE que afectan a 226 trabajadores desde que empezó el año

Los responsables sindicales advierten de que la cifra, similar a la registrada en 2009, "sigue siendo alarmante".

Imagen de archivo de la oficina del INAEM en Huesca.
La provincia acumula 20 ERE que afectan a 226 trabajadores desde que empezó el año
JAVIER BLASCO

huesca. Una veintena de expedientes de regulación de empleo se han presentado en la provincia de Huesca entre el 1 de enero y el 16 de marzo. Según los datos aportados ayer por Comisiones Obreras, que considera que la situación sigue siendo "alarmante", estas medidas han afectado a un total de 226 trabajadores, aunque solo en 7 casos han perdido su puesto, mientras que el resto están sometidos a suspensiones temporales. No obstante, los responsables sindicales mostraron su "temor" a que las empresas con expedientes vigentes no puedan mantener su actividad y acaben en procesos de extinción de los contratos.

Estas cifras son similares a las registradas en el mismo periodo de 2009, cuando en los tres primeros meses se presentaron ante la Dirección General de Trabajo 18 ERE. El ejercicio se cerró con 74 expedientes que afectaron a 1.484 empleados, por lo que, a la vista de los datos que arroja hasta ahora 2010, desde CC. OO. estiman que de seguir este ritmo, a 31 de diciembre se puede repetir el balance del año pasado.

Así lo aseguró el abogado de este sindicato y formador Pablo Castillo, que ayer participó en Huesca en una jornada sobre expedientes de regulación de empleo a la que asistieron medio centenar de delegados procedentes de Jaca, Sabiñánigo y la capital altoaragonesa. "Desde 2007 ha habido una multiplicación brutal de ERE, y en los dos meses y medio que llevamos de 2010 la tónica no cambia, sigue siendo alarmante porque se mantienen los niveles de 2009", advirtió.

En cuanto al predominio de las reestructuraciones temporales, Castillo aclaró que en esta crisis se ha recurrido más a la fórmula de suspensión debido a los problemas para obtener créditos, que han hecho que "las empresas no dispongan de dinero líquido para pagar las indemnizaciones por despidos".

No obstante, el abogado reconoció que "buena parte de la destrucción de empleo que se ha producido en estos dos últimos años no ha sido a través de los expedientes. Los primeros que salieron fueron los trabajadores temporales, luego llegó el goteo de los despidos individuales y finalmente, los ERE".

El abogado también llamó la atención sobre la "importante presión administrativa para llegar a acuerdos sobre los expedientes, más allá incluso de lo razonable". Por ello, dijo, "sería deseable que la administración, que es quien debe autorizar los despidos o las suspensiones, fuera más rigurosa y no presionara para alcanzar un acuerdo, porque hay circunstancias que en ningún caso justifican los expedientes".

"Están haciendo el agosto"

Por su parte, el secretario de la Unión Comarcal de Huesca Occidental de CC. OO., José Gabarre, denunció que algunos empresarios están aprovechando la difícil situación actual para hacer "su pequeño agosto", por ejemplo, al tratar de imponer la congelación salarial en los convenios que se están negociando, o al mandar al paro a trabajadores de empresas que se han fusionado con otras para no asumir "el lastre de la antigüedad". Asimismo, insistió en que "en esta provincia hay miedo a perder el trabajo, y por eso se firman acuerdos malos".

Gabarre aprovechó para denunciar la situación de la empresa de transportes Aintra, de Monzón, con 340 trabajadores. Según explicó, "lleva tres meses pagando tarde y mal a los trabajadores, que tienen que poner dinero para salir de viaje en la mayoría de los casos". "A día de hoy -por ayer- no han cobrado la paga completa, hace dos días les dieron un anticipo de 500 euros", añadió. Por su parte, la dirección de Aintra negó estos problemas y aseguró que las citadas declaraciones son "falsas y carentes de fundamento", al tiempo que aclaró que la empresa "está al corriente de pago de todas sus obligaciones laborales".