MEDIO AMBIENTE

Reciben 50 euros al mes por ir al trabajo en bicicleta

La empresa Gráficas Huesca, una imprenta ubicada en el polígono Monzú de la capital oscense, promueve entre sus empleados el uso de este medio de transporte como una buena práctica para contribuir a la sostenibilidad del entorno.

Adrián Inglada y Silvia Perbech, con sus bicicletas delante de la empresa Gráficas Huesca
Reciben 50 euros al mes por ir al trabajo en bicicleta
RAFAEL GOBANTES

Empezó como una broma pero ha terminado convirtiéndose en una más de las buenas prácticas medioambientales que ha implementado la empresa Gráficas Huesca, ubicada en el polígono Monzú. La dirección subvenciona con 50 euros al mes a aquellos empleados que acudan en bicicleta a su puesto de trabajo. Hasta ahora han sido dos las personas que, desde la primavera al otoño, se han sumado a la iniciativa y han utilizado las dos ruedas como medio habitual de transporte en días laborables.

 

La propuesta se planteó hace poco más de un año, en septiembre de 2008, cuando Gráficas Huesca obtuvo la calificación ISO 14.001 de gestión medioambiental. Además de minimizar residuos y controlar los vertidos, el director de la empresa, Mariano Sánchez, comentó entre sus 12 empleados que a los trabajadores que llegaran en bicicleta se les abonarían 50 euros por cada mes que completen su trayecto desde Huesca hasta al polígono Monzú.

 

Adrián Inglada, un aprendiz de 19 años, le tomó la palabra y cada día durante varios meses ha cubierto en bicicleta el recorrido que hay entre su casa, en el barrio de San José, y la imprenta, en la Ronda de la Industria. El joven tiene el turno de tarde, de 14.00 a 22.00, y cuando los días son largos y la condiciones atmosféricas favorables prefiere utilizar su bici en lugar del coche de su padre. "Es un deporte que me gusta y que suelo practicar los fines de semana y lo de recibir 50 euros aún me motivó mas", apuntó.

Más carriles bici

Desde su barrio a su trabajo atraviesa varias calles y una carretera con mucho tráfico. Solo en algunos tramos existe carril bici. La ausencia de esta vía en la mayor parte del trayecto es el principal motivo por el que Adrián cambia de vehículo en invierno. "Como llevo el turno de tarde salgo a las 22.00 y a esa hora no es muy seguro circular en bicicleta por la falta de carril bici y de iluminación y, sobre todo, porque hay muchos conductores que no respetan la circulación de los ciclistas", afirmó el empleado de Gráficas Huesca. Junto a él, otro compañero que ha estado cubriendo una baja maternal, también eligió pedalear para acudir al trabajo.

 

Silvia Perbech, diseñadora, también acude ocasionalmente a la bicicleta como medio de transporte. Protegida con casco, "porque tengo que dar ejemplo a mis hijas", tarda unos quince minutos en recorrer la distancia que hay entre la calle de Padre Calatayud (Polígono 29) y la empresa. En coche emplea unos diez. "Sueles coger la bici los fines de semana, como deporte con las crías, pero una medida así es la excusa perfecta para utilizarla más a menudo", comentó. Silvia comentó que los beneficios de pedalear van más allá de "contribuir al medio ambiente". "Es bueno para la glucosa, la diabetes y la salud en general y más cuando se tiene un trabajo sedentario", apostilló.

 

Al igual que Adrián Inglada, señaló la necesidad de más tramos de carril exclusivo para que cunda el uso de la bicicleta en Huesca. "Voy por el carril bici en la avenida de Danzantes, pero cuando llego al puente, en Ramón y Cajal, me bajo de la bici y voy caminando", explicó la diseñadora. "En sitios como el polígono, voy por la acera, que es ancha y está poco transitada", comentó el joven.

Otras medidas

Si se atiende solo a la cifra puede parecer que la medida no ha tenido seguimiento, pero Adrián y Javier Gracia o Adrián y Silvia son el 16% de la plantilla. "Hay gente que vive en Tierz o que antes de ir al trabajo deja a los niños en el colegio y pueden secundar la propuesta", señaló Mariano Sánchez

 

Animar a los empleados a usar la bicicleta es una más de las acciones con las que esta imprenta trata de minimizar el impacto medioambiental de su actividad. Hace unos meses instaló una procesadora de planchas con la que el consumo de agua, 60.000 litros al año, se ha reducido a cero. "Dicen que el agua es barata, pero la realidad es que es un recurso escaso", apuntó Sánchez.

 

Gráficas Huesca, donde los folios se utilizan por las dos caras, es la única empresa del sector en la provincia con la ISO 14.001.